EFE).- El papa Benedicto XVI dijo hoy que existe una “corresponsabilidad” en el camino de la “vida cristiana: cada uno, consciente de sus propios límites y defectos, debe aceptar las correcciones fraternas y ayudar a los otros con este particular servicio”.
El Pontífice así lo manifestó durante el tradicional rezo del Ángelus dominical que celebró en el palacio apostólico de Castel Gandolfo, cerca de Roma, donde pasa las vacaciones.
Benedicto XVI recordó el texto del Evangelio dedicado a la vida de la comunidad cristiana que establece que “el amor fraternal comporta también un sentido de responsabilidad recíproca”.
Por ello, señaló, “si mi hermano comete un error en mi contra, yo debo utilizar la caridad hacia él y, en primer lugar, hablar con él personalmente, explicándole que lo que ha hecho no es bueno”.
El Pontífice subrayó que este modo de actuar se llama “corrección fraternal” y que “no se trata de una reacción a la ofensa sufrida , sino que es un actuación movida por el amor hacia el hermano”.
El Pontífice subrayó que este modo de actuar se llama “corrección fraternal” y que “no se trata de una reacción a la ofensa sufrida , sino que es un actuación movida por el amor hacia el hermano”.
“Y si nuestro hermano no nos escucha, el Evangelio indica una gradación: Primero hay que volver a hablar con él, junto con otras dos o tres personas, para ayudarle mejor a darse cuenta de lo que ha hecho”, explicó Benedicto XVI.
Sin embargo, si “pese a esto, nuestro hermano rechaza la observación, hay que decírselo a la comunidad. Si no escucha ni siquiera a la comunidad, hay que hacerle percibir su alejamiento, que él mismo ha provocado separándose de la comunión de la Iglesia”, concluyó.