En la víspera de Año Nuevo,
Globovisión se dirige a los venezolanos para transmitirles sus deseos de
bienestar, esperanza y paz para el Año 2012. No obstante, al término de un año
que ha sido difícil y complicado para todos, queremos hablarle al País con el
compromiso que nos inspira el pueblo venezolano, al que hemos informado y
servido éticamente durante 17 años.
Venezuela lleva demasiados años sumergida en una crisis que destruye cada día más el Estado de Derecho y su Democracia, la cual ha tenido efectos perversos de Injusticia e Impunidad, padecidos por la inmensa mayoría de los venezolanos y especialmente por las víctimas de la violencia y sus familiares, que han padecido secuestros y asesinatos al amparo de la incapacidad de los Poderes Públicos, todos bajo control del Poder Ejecutivo Nacional.
Prueba evidente de esta crisis ha sido la decisión política del Gobierno de sancionar a Globovisión por INFORMAR sobre un asunto de interés público, como lo fue la crisis en la cárcel El Rodeo (a través de una multa impuesta por CONATEL), como parte de su política sistemática de hostigamiento en contra del Canal, por causa de su línea editorial independiente, que busca incitar a la autocensura, acorralar a Globovisión y en última instancia inducir a su cierre definitivo. Esta reciente multa es arbitraria, injusta, financieramente impagable y moralmente inaceptable para una Institución que está comprometida con la Libertad de Información y con la defensa de los Derechos Humanos, como lo es Globovisión.
Venezuela lleva demasiados años sumergida en una crisis que destruye cada día más el Estado de Derecho y su Democracia, la cual ha tenido efectos perversos de Injusticia e Impunidad, padecidos por la inmensa mayoría de los venezolanos y especialmente por las víctimas de la violencia y sus familiares, que han padecido secuestros y asesinatos al amparo de la incapacidad de los Poderes Públicos, todos bajo control del Poder Ejecutivo Nacional.
Prueba evidente de esta crisis ha sido la decisión política del Gobierno de sancionar a Globovisión por INFORMAR sobre un asunto de interés público, como lo fue la crisis en la cárcel El Rodeo (a través de una multa impuesta por CONATEL), como parte de su política sistemática de hostigamiento en contra del Canal, por causa de su línea editorial independiente, que busca incitar a la autocensura, acorralar a Globovisión y en última instancia inducir a su cierre definitivo. Esta reciente multa es arbitraria, injusta, financieramente impagable y moralmente inaceptable para una Institución que está comprometida con la Libertad de Información y con la defensa de los Derechos Humanos, como lo es Globovisión.
Aún más insólitas son las recientes sentencias de la Corte Primera de lo Contencioso Administrativo, que arbitrariamente negaron a Globovisión la protección cautelar frente a la multa, y a las que no dudamos en calificar de error judicial inexcusable y de grave aberración, razón por la cual
fueron apeladas ante el Tribunal Supremo de Justicia.
Globovisión ha sido siempre un celoso cumplidor de sus obligaciones y de las leyes, y esta ocasión no será una excepción. Sin embargo, hace tres días CONATEL nos amenazó con cobrar judicialmente la multa, con el FALSO pretexto de que se agotaron las instancias judiciales. Queremos aclarar que la Corte Primera decidió únicamente sobre las medidas cautelares pero no sobre el recurso de nulidad, aún pendiente de decisión; y que las dos sentencias cautelares de la Corte Primera fueron oportunamente apeladas ante el TRIBUNAL SUPREMO DE JUSTICIA, también pendientes de decisión, cuyas sentencias son de obligatorio acatamiento por CONATEL.
Por lo tanto, NO ES VERDAD QUE SE AGOTARON LAS INSTANCIAS JUDICIALES, como falsamente lo afirmó CONATEL para justificar su pretensión de cobro judicial. ¡Globovisión sigue a la espera de Justicia y tiene derecho a ella! Y acatará las decisiones de los tribunales que tienen jurisdicción en Venezuela, aunque no le favorezcan.
En un Estado de
Derecho, las conductas supuestamente censurables de Globovisión y de cualquier
otra persona deben juzgarse conforme a la ley, y no conforme al capricho de los
jueces o del Poder político que los controla. En un Estado de Derecho,
Globovisión debió ser juzgada por organismos y jueces imparciales e
independientes del Gobierno, y no hubiera sido sancionada por ejercer
legítimamente la libertad de información, conforme a la Constitución y los
tratados internacionales de Derechos Humanos. A pesar de las dificultades,
Globovisión sigue respetando los procesos legales y reclama una vez más que
LA JUSTICIA DEBE SER IGUAL PARA
TODOS. Es la exigencia compartida de una sociedad libre que está harta
de la Impunidad, que no se deja amedrentar y que exige Justicia para quienes son
víctimas de la violencia y para quienes resisten a la intolerancia y la
autocracia de un Poder Político Absoluto.
Globovisión continuará su lucha
por la Justicia, la Democracia, la Paz y la convivencia pacífica entre todos los venezolanos.
Los tiempos actuales son muy
exigentes y nos esperan muchas dificultades, pero las afrontaremos con los
valores constitucionales y democráticos que nos respaldan y que nos hacen
sentirnos orgullosos de ser parte de Globovisión, la principal ventana de
información para los venezolanos.
No llegamos hasta el 2012 para dejarnos derrotar por las dificultades ni para renunciar a nuestra esperanza de construir una Venezuela mejor, donde los derechos y la justicia sean para todos los venezolanos, y no sólo para los amigos del Poder.
Globovisión seguirá defendiendo sus derechos y aunque el Directorio de Responsabilidad Social discrecionalmente impuso una fecha para pagar la multa (31 de diciembre), continuamos a la espera de que la Corte Primera y el Tribunal Supremo suspendan o anulen la multa, y emitan sentencias definitivas. Globovisión sigue adelante y seguirá siendo la principal ventana de información, auténticamente libre, independiente y al servicio de toda la sociedad.
No llegamos hasta el 2012 para dejarnos derrotar por las dificultades ni para renunciar a nuestra esperanza de construir una Venezuela mejor, donde los derechos y la justicia sean para todos los venezolanos, y no sólo para los amigos del Poder.
Globovisión seguirá defendiendo sus derechos y aunque el Directorio de Responsabilidad Social discrecionalmente impuso una fecha para pagar la multa (31 de diciembre), continuamos a la espera de que la Corte Primera y el Tribunal Supremo suspendan o anulen la multa, y emitan sentencias definitivas. Globovisión sigue adelante y seguirá siendo la principal ventana de información, auténticamente libre, independiente y al servicio de toda la sociedad.
Y reiteramos a los venezolanos
nuestros deseos de bienestar, esperanza y paz para el Año 2012.
Caracas [Venezuela], 30 de diciembre del 2011
Caracas [Venezuela], 30 de diciembre del 2011