Los equipos de
rescate recuperaron tres cadáveres en el transcurso de la tarde entre
los escombros de tres edificios de oficinas que se levantaban en la
calle Treze de Maio, situada en el emblemático sector carioca de Cinelandia,
precisó un portavoz de la Defensa Civil del estado de Río de Janeiro.
Las
víctimas son siete hombres y seis mujeres, mientras que el sexo
de uno de los cadáveres todavía no ha sido establecido, explicó la fuente que no
pudo precisar el número de desaparecidos.
Al comienzo de la tarde el
secretario regional de Defensa Civil, el coronel Sergio Simões, informó de que
el cadáver de la víctima número trece fue hallado de manera casual entre
los escombros retirados del lugar de la tragedia y llevados a un
vertedero.
"He venido aquí a prestar un esclarecimiento.
Esta madrugada un cuerpo en muy mal estado, muy lacerado, salió de aquí sin que
nos diéramos cuenta y fue llevado a un local destinado a los escombros
retirados. Identificamos ese cuerpo hace poco, accionamos su traslado y lo
llevamos al IML (Instituto Médico Legal)", declaró a
periodistas.
El coronel precisó que por una de las manos pudieron
determinar que se trataba de una mujer.
Los cuerpos de socorro continúan
trabajando de forma ininterrumpida desde el momento del siniestro, que también
dejó a seis personas heridas.
Las autoridades han descartado la
posibilidad de hallar supervivientes bajo los escombros.
Mientras, la
empresa Tecnología Organizacional, que ejecutaba obras dentro de uno de los
edificios siniestrados, descartó que los trabajos fueran la causa del
derrumbe.
"Tengo la certeza de que las obras no afectaron las
estructuras. Era una reforma interna para la adecuación del espacio. Cambiamos
el suelo, quitamos los elementos de división y las paredes del baño, que no eran
estructurales, sino de baldosa", dijo Sergio Alves, representante de la
empresa.
La gobernación de Río de Janeiro decretó tres días de luto a
partir de hoy y se suspendieron varios actos oficiales, entre ellos la
inauguración de un puente en la que iba a participar la presidenta brasileña,
Dilma Rousseff.
EFE