Las personas que tienen tanorexia u obsesión por el bronceado permanente,deben ser tratadas de inmediato ya que esta conducta incrementa en gran medida el riesgo de padecer cáncer de piel, advirtió la Liga Peruana contra el Cáncer.
El gerente general de dicha institución, José Méndez, explicó que las personas tanoréxicas tienen un desorden psicosomático que las lleva en verano a desear un tono de piel más oscuro, por lo que exponen su cuerpo mucho tiempo al sol en la playa, el campo, la piscina u otro lugar al aire libre.
Aquellas que tienen mejor condición económica acuden a las cabinas de rayos ultravioleta o “camas solares” conocidas como “solarium”, donde permanecen un tiempo determinado expuestas a la radiación para alcanzar el “bronceado perfecto”.
“En ambos casos, las personas suelen utilizar ‘bronceadores’ o productos cosméticos que aceleran el proceso de oscurecimiento de la piel, sin percatarse que están incrementando la posibilidad del daño a su organismo”, anotó.
Méndez dijo que este desorden psicosomático debe ser tratado con urgencia por un psicoterapeuta, y la persona debe tomar las medidas de protección necesarias para no dañar más su piel y organismo en general por la exposición excesiva a los rayos ultravioleta.
Señaló que al igual que la piel, los ojos son sumamente sensibles a la radiación,por lo que se debe tener extremo cuidado para evitar problemas de salud como las cataratas u otros derivados de la exposición sin la debida protección.
“En la escala de radiación ultravioleta, que tiene un nivel máximo de 15 considerado extremo, Lima registró un nivel de 14, es decir, muy elevado, lo cual nos obliga a tomar las medidas de protección para evitar daños a nuestro organismo, sobre todo la piel y los ojos”, manifestó.
El representante de la Liga Peruana contra el Cáncer ofreció estos alcances tras lanzar una campaña de prevención de cáncer de piel en las playas de Lima, en la que participan mil 500 voluntarios.
ANDINA