Este año habrá 200 millones de
desempleados en el mundo, pero pueden llegar a los 204 millones si la
desaceleración se materializa y el crecimiento mundial cae por debajo del 2
%, según informó hoy la Organización Internacional del Trabajo
(OIT).
Los datos se extraen del informe Tendencias Mundiales del Empleo 2012 de la OIT, que predice diferentes escenarios en función del crecimiento, estancamiento o empeoramiento de la economía mundial.
El escenario base de la OIT prevé que el número de desempleados en 2012 sea de 200 millones y que aumente hasta alcanzar los 206 millones en 2016, con una tasa de paro que se mantendría invariable en torno al 6%.
En caso de un escenario de desaceleración o de recesión, la cifra se dispararía hasta los 204 millones en 2012 y los 209 millones en 2013.
Si la recuperación se produjera, especialmente en la eurozona, la predicción sería de 199 millones en 2012, lo que no alteraría la tasa de desempleo del 6%.
Estas cifras, sin embargo, no reflejan un fenómeno creciente, el de los "desengañados", esas personas que tendrían que formar parte de la población activa y que no sólo no están empleadas, sino que además han dejado de buscar trabajo porque consideran que el mercado laboral no tiene un sitio para ellas.
La OIT calcula que los "desengañados" en el mundo son unos 29 millones, lo que equivale al 15% del total de desempleados, por lo que, si se contabilizaran, la tasa mundial de paro alcanzaría el 6,9%.
Por regiones, en 2012 las tasas de desempleo se situarán en un 8,5% en los países desarrollados, un 7,2 % en Latinoamérica y el Caribe, un 4,1 % en Asia Oriental (incluida China), un 4,7 % en el Sudeste Asiático, un 3,8 % en Asia del Sur (incluyendo India), un 10,2 % en Oriente Medio, un 10,9 % en el norte de África y un 8,8 % en África Subsahariana.
Del déficit de 200 millones de empleos, 27 millones se pueden achacar directamente a la crisis, a contar desde 2007, según el organismo internacional, que cifra en 500.000 los puestos destruidos o no creados durante los últimos dos años.
De hecho, la OIT considera que el "mayor desafío" es la creación de 600 millones de puestos de trabajo en el próximo decenio, los 200 que ya faltan más un déficit de 40 millones anuales a causa de las nuevas incorporaciones al mercado laboral.
EFE
Los datos se extraen del informe Tendencias Mundiales del Empleo 2012 de la OIT, que predice diferentes escenarios en función del crecimiento, estancamiento o empeoramiento de la economía mundial.
El escenario base de la OIT prevé que el número de desempleados en 2012 sea de 200 millones y que aumente hasta alcanzar los 206 millones en 2016, con una tasa de paro que se mantendría invariable en torno al 6%.
En caso de un escenario de desaceleración o de recesión, la cifra se dispararía hasta los 204 millones en 2012 y los 209 millones en 2013.
Si la recuperación se produjera, especialmente en la eurozona, la predicción sería de 199 millones en 2012, lo que no alteraría la tasa de desempleo del 6%.
Estas cifras, sin embargo, no reflejan un fenómeno creciente, el de los "desengañados", esas personas que tendrían que formar parte de la población activa y que no sólo no están empleadas, sino que además han dejado de buscar trabajo porque consideran que el mercado laboral no tiene un sitio para ellas.
La OIT calcula que los "desengañados" en el mundo son unos 29 millones, lo que equivale al 15% del total de desempleados, por lo que, si se contabilizaran, la tasa mundial de paro alcanzaría el 6,9%.
Por regiones, en 2012 las tasas de desempleo se situarán en un 8,5% en los países desarrollados, un 7,2 % en Latinoamérica y el Caribe, un 4,1 % en Asia Oriental (incluida China), un 4,7 % en el Sudeste Asiático, un 3,8 % en Asia del Sur (incluyendo India), un 10,2 % en Oriente Medio, un 10,9 % en el norte de África y un 8,8 % en África Subsahariana.
Del déficit de 200 millones de empleos, 27 millones se pueden achacar directamente a la crisis, a contar desde 2007, según el organismo internacional, que cifra en 500.000 los puestos destruidos o no creados durante los últimos dos años.
De hecho, la OIT considera que el "mayor desafío" es la creación de 600 millones de puestos de trabajo en el próximo decenio, los 200 que ya faltan más un déficit de 40 millones anuales a causa de las nuevas incorporaciones al mercado laboral.
EFE