El presidente Barack Obama afirmó este jueves que Estados Unidos
"pasa la página de una década de guerras" y controlará su gasto militar, pero
mantendrá la supremacía mundial de sus ejércitos.
Obama
participó en una conferencia de prensa en el Pentágono junto con el jefe de ese
departamento, Leon Panetta, y el jefe del Estado Mayor Conjunto, el general de
Ejército (de Tierra) Martin Dempsey en la cual presentó la nueva estrategia de
defensa de EE.UU.
"Hemos tenido éxito en la defensa de nuestra nación,
llevamos la guerra al enemigo y restablecimos el liderazgo global de Estados
Unidos", afirmó el presidente.
Obama señaló que Estados Unidos
debe "renovar su fortaleza económica que es el sustento de su fortaleza en el
mundo", y agregó que en la nueva estrategia, el país fortalecerá su presencia en
la región de Asia y el Pacífico.
"Las reducciones de presupuesto
no se harán a costa de esta región crítica", añadió. "Seguiremos apoyando
nuestras alianzas, incluida la OTAN y seguiremos vigilantes, especialmente en el
Oriente Medio".
El Pentágono encara reducciones de presupuesto de entre
400.000 millones y 1 billón de dólares en la próxima década, no obstante, Obama
afirmó que "Estados Unidos mantendrá la superioridad militar con unas Fuerzas
Armadas ágiles, flexibles y listas para toda la gama de contingencias y
amenazas".
El presidente presentó el esfuerzo de control del
presupuesto de defensa como una desaceleración del gasto e indicó que seguirá
siendo equivalente al que existía al final de la anterior administración
republicana.
El presupuesto militar de Estados Unidos continuará
siendo, dijo, mayor que la suma de los presupuestos de defensa de los diez
países que siguen en la lista.
En la rueda de prensa no se divulgaron
detalles de los recortes, que irán saliendo a luz a medida que el gobierno de
Obama prepare el presupuesto para el período fiscal 2013, que comienza el 1 de
septiembre.
La revisión de estrategia enfatiza la atención a la
región de Asia y se aparta de las guerras prolongadas y campañas terrestres como
las que han ocupado a Estados Unidos en Afganistán e
Irak.
Asimismo, se incluye una reducción del contingente del
Ejército (de Tierra) y de la Infantería de Marina, las dos fuerzas que han
tenido la mayor parte en las campañas afgana e iraquí, mientras que habrá un
fortalecimiento de la Fuerza Aérea y la Marina de Guerra.
EFE