Al menos 47 personas han muerto en enfrentamientos entre grupos de
rebeldes tuareg y fuerzas gubernamentales en los dos últimos días en el
noroeste de Mali, informó el Ministerio del Interior.
"Los
insurgentes han registrado importantes pérdidas", indica un comunicado
oficial divulgado anoche en el que se explica que entre los muertos figuran dos
soldados y 45 rebeldes.
De ellos, 35 murieron en los combates registrados
en la ciudad de Aguelhoc y otros diez en Tessalit, según la fuente, que añade
que un número "importante" de tuareg resultaron heridos y que se
destruyeron varios de sus vehículos.
Los rebeldes lanzaron el
pasado martes un primer asalto a la ciudad de Menaka, antes de atacar, un día
después, Aguelhoc y Tessalit.
El portavoz del Movimiento Nacional de
Liberación de Azawed (MNLA), organización política armada de los rebeldes tuareg
que lanzaron la ofensiva, indicó, en un comunicado, que su acción
respondía al rechazo al diálogo por parte de las autoridades de Bamako y que los
ataques iban a continuar.
El MNLA lucha con el poder central
maliense para lograr que la región bereber de Azawed, situada junto a las
fronteras de Argelia y Níger, tenga un estatus especial que le permita
no estar bajo el control del Gobierno de Bamako.
Las autoridades
malienses afirman que las fuerzas desplegadas en los últimos días en la zona
donde se registran los combates han retomado el control de la situación y que no
se han producido más enfrentamientos desde la noche del pasado miércoles.