El presidente del BCV, Nelson Merentes, aseguró que el ajuste en el tipo de cambio no tiene por qué afectar todos los precios, pues hay cosas que se producen en el país, que tienen mínimo componentes importados y son de consumo masivo. Merentes señaló que no debería, además, registrarse un efecto a corto plazo.
Recordó que la tasa de cambio ya se movió en 2010 y la inflación apenas fluctuó en 3%, mientras que en 2011 este indicador bajó. Agregó que si en Venezuela se sigue produciendo lo que se consume de manera masiva, el impacto de la modificación debe ser leve.
Durante una entrevista concedida a una televisora privada, Merentes indicó que el ajuste tiene que estar orientada al cumplimiento de la meta de crecimiento de 6% y una inflación ubicada entre 13 y 16%.
Aseguró que el país cuenta con más de 20 mil millones de dólares para importaciones, suficientes divisas, pero que en 2012 la demanda se colocó p0r encima de la oferta y eso es lo que se debe racionalizar.