Un tribunal militar de la ciudad egipcia de Suez condenó hoy a cadena perpetua a once supuestos miembros de los Hermanos Musulmanes por cometer actos de violencia durante las protestas del pasado mes, informaron a Efe fuentes judiciales.
Los islamistas fueron sentenciados por haber destruido seis vehículos militares y agredido a soldados en las manifestaciones organizadas en Suez tras el desmantelamiento policial en El Cairo de dos acampadas de los seguidores del depuesto presidente Mohamed Mursi.
Por ley, un tribunal castrense es el encargado de juzgar aquellos casos relacionados con ataques contra las fuerzas militares.
Numerosos líderes e integrantes de los Hermanos han sido arrestados desde que el pasado 3 de julio el Ejército depusiera al presidente Mohamed Mursi, que perteneció a los Hermanos Musulmanes antes de asumir el poder en junio de 2012.
Entre los detenidos destaca el guía espiritual de la cofradía, Mohamed Badía, que afronta cargos por incitar a la violencia, y el propio Mursi, que se encuentra retenido por los militares en un lugar desconocido y que está acusado de haber ordenado la muerte de manifestantes que protestaban en diciembre contra su decisión de blindar sus poderes frente a la justicia.
Una ola de violencia estalló el pasado 14 de agosto a raíz del desalojo por la fuerza de las acampadas que mantenían los seguidores de Mursi en contra del golpe militar, lo que causó la muerte de un millar de personas en todo el país.
Las autoridades sostienen que están llevando a cabo una lucha contra el terrorismo y han reforzado la seguridad en el país en previsión de nuevas manifestaciones, como las que hoy han convocado los Hermanos Musulmanes y otros grupos afines.