El proceso de recuperación de la ciudad de Nueva York tras los atentados del 11 de septiembre dio este miércoles un nuevo paso con la inauguración del rascacielos Four World Trade Center, la primera torre de oficinas que abre el complejo del World Trade Center (WTC) después de esos ataques terroristas.
"Al abrir las puertas del rascacielos, el lugar vuelve a ser parte del crecimiento continuo de Nueva York y se conecta de nuevo con la ciudad que le rodea", afirmó el alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg, en la ceremonia de inauguración del edificio, de 298 metros de altura.
Por su parte, presidente de World Trade Center Properties, Janno Lieber, destacó que los neoyorquinos por fin sienten que están "recuperando" Nueva York y que el WTC vuelve a ser parte de la ciudad.
El Four World Trade Center, de setenta y dos pisos de altura, roza en la esquina sureste con el Memorial del 11S, lo que ha hecho en la inauguración estuviera aún más presente los atentados que ocurrieron hace ya doce años.
El edificio, que ha estado en construcción durante los últimos seis años, fue diseñado por el arquitecto Fumihiko Maki, ganador del premio Pritzker de arquitectura en 1993.
El rascacielos ya tiene dos inquilinos que ocupan parte de su espacio de oficinas: la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey (dueña del terreno en que se levanta el World Trade Center) y la Ciudad de Nueva York.
Ahora, el nuevo reto es encontrar nuevos arrendadores para el resto del espacio de oficinas.
La inauguración da comienzo a una nueva etapa en la que se irán abriendo los rascacielos que han sustituido a los destruidos durante los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en la zona del World Trade Center.
El anterior edificio situado en este punto, de tan solo 36 metros de altura, quedó tan dañado por el derrumbe de las Torres Gemelas que se decidió derribarlo.
La torre inaugurada el miércoles, que ha sido el rascacielos que ha tardado menos en construirse en la zona, es la más simple de las cuatro previstas, con un diseño minimalista de líneas muy rectas y recubierta de cristal.
El edificio más importante de la zona, Freedom Tower, situado junto a la base de las Torres Gemelas, se abrirá en los primeros meses del año próximo.
Se espera que esta última torre esté concluida para el 2014.
El Consejo de Edificios Altos y Hábitat Urbano (CTBUH, por sus siglas en inglés) anunció el martes que Freedom Tower es el edificio más alto de Estados Unidos, gracias a sus 541 metros que equivalen a los simbólicos 1.776 pies, la cifra del año de la Declaración de Independencia de Estados Unidos.
Este edificio, que está siendo construido por la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey, abrirá sus puertas al público en 2015 y tiene ya aproximadamente un 55 % de su espacio arrendado.
Sin embargo, en otros dos edificios del complejo, los números 2 y 3 World Trade Center, la construcción se encuentra parada hasta que se encuentren más inquilinos.
Además, hace tres semanas se abrió un camino peatonal que conecta la estación del PATH (ferrocarril de cercanías hacia Nueva Jersey) con la terminal de transbordadores para mejorar las conexiones a la zona financiera de la ciudad.
Ese corredor, obra del español Santiago Calatrava, es la primera parte del nuevo intercambiador de transportes que se construye en la zona, cuya conclusión está prevista para 2015 y con un presupuesto de 4.000 millones de dólares.
"Al abrir las puertas del rascacielos, el lugar vuelve a ser parte del crecimiento continuo de Nueva York y se conecta de nuevo con la ciudad que le rodea", afirmó el alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg, en la ceremonia de inauguración del edificio, de 298 metros de altura.
Por su parte, presidente de World Trade Center Properties, Janno Lieber, destacó que los neoyorquinos por fin sienten que están "recuperando" Nueva York y que el WTC vuelve a ser parte de la ciudad.
El Four World Trade Center, de setenta y dos pisos de altura, roza en la esquina sureste con el Memorial del 11S, lo que ha hecho en la inauguración estuviera aún más presente los atentados que ocurrieron hace ya doce años.
El edificio, que ha estado en construcción durante los últimos seis años, fue diseñado por el arquitecto Fumihiko Maki, ganador del premio Pritzker de arquitectura en 1993.
El rascacielos ya tiene dos inquilinos que ocupan parte de su espacio de oficinas: la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey (dueña del terreno en que se levanta el World Trade Center) y la Ciudad de Nueva York.
Ahora, el nuevo reto es encontrar nuevos arrendadores para el resto del espacio de oficinas.
La inauguración da comienzo a una nueva etapa en la que se irán abriendo los rascacielos que han sustituido a los destruidos durante los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en la zona del World Trade Center.
El anterior edificio situado en este punto, de tan solo 36 metros de altura, quedó tan dañado por el derrumbe de las Torres Gemelas que se decidió derribarlo.
La torre inaugurada el miércoles, que ha sido el rascacielos que ha tardado menos en construirse en la zona, es la más simple de las cuatro previstas, con un diseño minimalista de líneas muy rectas y recubierta de cristal.
El edificio más importante de la zona, Freedom Tower, situado junto a la base de las Torres Gemelas, se abrirá en los primeros meses del año próximo.
Se espera que esta última torre esté concluida para el 2014.
El Consejo de Edificios Altos y Hábitat Urbano (CTBUH, por sus siglas en inglés) anunció el martes que Freedom Tower es el edificio más alto de Estados Unidos, gracias a sus 541 metros que equivalen a los simbólicos 1.776 pies, la cifra del año de la Declaración de Independencia de Estados Unidos.
Este edificio, que está siendo construido por la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey, abrirá sus puertas al público en 2015 y tiene ya aproximadamente un 55 % de su espacio arrendado.
Sin embargo, en otros dos edificios del complejo, los números 2 y 3 World Trade Center, la construcción se encuentra parada hasta que se encuentren más inquilinos.
Además, hace tres semanas se abrió un camino peatonal que conecta la estación del PATH (ferrocarril de cercanías hacia Nueva Jersey) con la terminal de transbordadores para mejorar las conexiones a la zona financiera de la ciudad.
Ese corredor, obra del español Santiago Calatrava, es la primera parte del nuevo intercambiador de transportes que se construye en la zona, cuya conclusión está prevista para 2015 y con un presupuesto de 4.000 millones de dólares.
EFE