Un grupo de investigadores de la Universidad de California, San Francisco, Estados Unidos, (UCSF) han logrado bloquear un conductor principal del cáncer.
El hallazgo consiste en hacer pequeñas moléculas que irreversiblemente se dirigen hacia una versión mutante de una proteína denominada Ras, sin unirse a su forma normal.
Esto según informa una publicación de la revista "Nature".
El Ras es una de las proteínas más activas en los tumores de cáncer de pulmón (El más mortal en EEUU) y presente en más de tres de diez tipos de cáncer.
El estudio arrojó que cuando se probaron en células de cáncer de pulmón humano en cultivo, las moléculas mataron de manera eficiente las células de cáncer impulsadas por Ras.
El grupo de la UCSF, dirigido por Kevan Shokat, investigador del 'Howard Hughes Medical Institute', en Chevy Chase, Maryland, Estados Unidos, y director del Departamento de Farmacología Celular y Molecular de UCSF, diseñó pequeñas moléculas que se unen irreversiblemente a Ras dentro de una cavidad previamente desconocida, por lo general de corta duración, que aparece en la proteína mutante que cambia de forma.
Esta proteína ha sido considerada desde 1980 un objetivo para el tratamiento farmacológico del cáncer, sin embargo habían sido múltiples los fracasos en los esfuerzos de varias empresas de fármacos para bloquear su función EP
El hallazgo consiste en hacer pequeñas moléculas que irreversiblemente se dirigen hacia una versión mutante de una proteína denominada Ras, sin unirse a su forma normal.
Esto según informa una publicación de la revista "Nature".
El Ras es una de las proteínas más activas en los tumores de cáncer de pulmón (El más mortal en EEUU) y presente en más de tres de diez tipos de cáncer.
El estudio arrojó que cuando se probaron en células de cáncer de pulmón humano en cultivo, las moléculas mataron de manera eficiente las células de cáncer impulsadas por Ras.
El grupo de la UCSF, dirigido por Kevan Shokat, investigador del 'Howard Hughes Medical Institute', en Chevy Chase, Maryland, Estados Unidos, y director del Departamento de Farmacología Celular y Molecular de UCSF, diseñó pequeñas moléculas que se unen irreversiblemente a Ras dentro de una cavidad previamente desconocida, por lo general de corta duración, que aparece en la proteína mutante que cambia de forma.
Esta proteína ha sido considerada desde 1980 un objetivo para el tratamiento farmacológico del cáncer, sin embargo habían sido múltiples los fracasos en los esfuerzos de varias empresas de fármacos para bloquear su función EP