De las 123 aeronaves de la flota nacional, 62 están paradas. La mayoría de ella no están absolutamente dañadas, sino que poseen desperfectos mínimos que han obligado a las aerolíneas a sacarlas de circulación, indicó este domingo en Aló Venezuela el capitán Jorge Álvarez, presidente de la Cámara de Empresas Venezolanas de Transporte Aéreo (Ceveta).
Mencionó que -sin duda- la seguridad es prioridad, por lo que cuando algún avión “tiene un desperfecto a nadie se le ocurre volar”. “No es que todo esté dañado, pero si hay una nimiedad y no se puede reparar al momento, la aeronave se tiene que parar, previa consulta del manual de riesgos mínimos”, explicó .
El piloto retirado aseguró que -aunque algunas aerolíneas tienen deficiencias- el sistema de transporte aéreo en Venezuela es seguro y afirmó que cuando un avión despega de un aeropuerto venezolano lo hace “dentro de todas las normas de seguridad posibles y con el personal de vuelo 100% preparado”.
“Cada vez que a una aeronave se le cambia algo, se tiene que esperar por una certificación del permiso de Aeronáutica Civil, ellos (la organización) no van a permitir que un avión se mueva si no cumple con todas las exigencias de seguridad”, puntualizó y comentó que en la nación no existen antecedentes de accidentes porque el control “se hace con esmero, voluntad y pasión”.