La presidenta argentina, Cristina Fernández, defendió su proyecto de ley para pagar localmente a los tenedores de bonos emitidos bajo legislación estadounidense que no pueden cobrar por un fallo de un juez de Nueva York a favor de fondos de inversión que litigan contra el país suramericano.
En el acto por los 160 años de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Fernández afirmó que la iniciativa, remitida este martes al Parlamento, de mayoría oficialista, "evidencia la voluntad de pago de Argentina al ciento por ciento de sus acreedores".
"Con este proyecto generamos los instrumentos para que esa voluntad de pago se vea plasmada en el deposito de cada vencimiento de cada una de las obligaciones en tiempo y forma", dijo Fernández.
La iniciativa incluye sustituir al Bank of New York Mellon por el local estatal Banco Nación como agente fiduciario de pago y que los acreedores nombren sus propios agentes de cobro para garantizar que se harán con su dinero y evitar así la orden de bloqueo de fondos dispuesta por el juez neoyorquino Thomas Griesa, quien falló a favor de los fondos especulativos que litigan contra Argentina.
El proyecto de ley deja además abierta la posibilidad para que el 7 % de los acreedores que no aceptaron los canjes de 2005 y 2010, incluidos los querellantes, se adhieran ahora.
Fernández precisó que el próximo vencimiento de deuda, por 200 millones de dólares, será el próximo 30 de septiembre, habrá otro en octubre y uno más, por 1.000 millones de dólares, en diciembre.
"Ante la obstrucción para que puedan cobrar quienes son los legítimos acreedores de Argentina y los legítimos dueños de los recursos, hemos enviado este proyecto de ley", sostuvo la presidenta.
Fernández insistió en que la decisión de Griesa de bloquear fondos que Argentina había depositado para el pago de un vencimiento el 30 de junio último es una "obstrucción ilegal e ilegítima".
La mandataria negó que la iniciativa girada al Parlamento complique un regreso de Argentina a los mercados de capitales internacionales.
"Es al revés. Estamos ante una oportunidad histórica de generar un mercado de capitales propio en Argentina, que es lo que tenemos que lograr", aseguró Fernández.
En otros tramos de su discurso, la jefa de Estado defendió el proyecto de ley de abastecimiento que se discute en el Congreso por estos días y que es fuertemente cuestionado por la oposición y gran parte de los empresarios.
Asimismo, criticó a la oposición por sus iniciativas que buscan derogar la ley antiterrorista, que Fernández pidió a la Justicia aplicar ante la quiebra de una empresa de capital estadounidense a la que acusa de "alteración al orden económico y financiero".
En cuanto a la marcha de la economía, la mandataria aseguró que, pese a la crisis global, en Argentina se registran mejoras en el consumo privado y en la inversión pública y conserva una balanza comercial con superávit, que, dijo, sería mayor si no fuera por las abultadas importaciones de energía.
Del mismo modo, destacó la "solidez" del sistema financiero local y el nivel de ahorro doméstico.
EFE