Los catorce efectivos de Luis Enrique que se han quedado en casa, incluidos los canteranos Sergi Samper y Sandro Ramírez, reanudarán esta mañana (10.30 h.) los entrenamientos en la Ciutat Esportiva. El técnico asturiano ha dispuesto cuatro sesiones esta semana, de martes a viernes con fin de semana festivo, y ha dejado para el jueves por la tarde la más especial, un partidillo de entrenamiento contra el Barça B de Eusebio con un objetivo principal: acelerar la adaptación al estilo del sancionado Luis Suárez.
Con el paso de los entrenamientos, el delantero uruguayo va mejorando no ya sólo el estado físico gracias a la intensidad de las sesiones sino también el elevadísimo ritmo de circulación de balón con los numerosos y variados ejercicios de posición y posesión. Aunque no hay mejor ejercicio que un partido de once contra once a todo el campo contra un rival motivadísimo como el formado por los jugadores del 'B', que querrán convencer a Luis Enrique.
Curiosamente, estos partidos contra el filial, que esta temporada serán frecuentes, fue una de las peticiones que el club le negó la pasada temporada a Gerardo Martino. Cuando aterrizó, el Tata pidió poder medirse al Barça B las semanas que no hubiera compromiso entre semana, ni de Champions ni de Copa del Rey. Incomprensiblemente para el Tata, su deseo no fue aceptado porque alteraba la preparación del filial. Luis Enrique manda mucho más.
MD
