Este martes, el obispo de Guayana, Mariano Parra, desde el estado Zulia, aseguró que “la Virgen de la Chinita está enraizada en el corazón del zuliano” y que “desde muy niños nos enseñan a querer a amar a la Virgen de la Chiquinquirá”.
“Desde hace 305 años que se realizó aquel milagro, en aquella pequeña casita de la calle El Milagro, el pueblo zuliano ha puesto toda su confianza en la madre de Dios, que quiso visitar esta tierra zuliana y el pueblo la ha aceptado con un cariño y una fe muy grande“, indicó.
También, dijo que “la gaita siempre estuvo relacionada con la Virgen de la Chiquinquirá. No había alguna gaita que no tuviera alguna referencia a la Virgen de la Chinita y al lago de Maracaibo. Al correr del tiempo se ha venido cambiando a la protesta, hay gaitas que son menos religiosas, pero son gaitas que expresan el sentir del zuliano y el sentir de nuestro pueblo marabino. No se han acabado las tradiciones, se han modificado y eso es muy normal”.
Aseguró que “siempre Dios y la Virgen han estado al lado de los más necesitados, de los más excluidos, de los más empobrecidos de la tierra y uno lo ve en el pueblo. El pueblo más empobrecido, el sencillo, el humilde, es el pueblo que le tiene devoción y fe a la santísima Virgen María“, aseveró.
“Estoy convencido de que en Venezuela necesitamos renovar nuestra fe como católicos convencidos, no por tradición, sino por convicción. Porque al vivir tú la fe, eso implica un transformación total en tu persona. Somos pecadores, siempre va a haber alguna falla en nosotros, el pecado no es solo matar y robar, es todo acto de egoísmo en la vida”, explicó.
Por otra parte, el obispo afirmó que “el Papa Francisco le ha dado a la figura del Santo Padre un vuelco. Ha tratado de que la gente vea que ser Papa no significa que esté alejado del pueblo. Sin embargo, muchísimos sacerdotes son cercanos a sus pueblos. Yo creo que él le ha dado ese tinte latinoamericano al papado y la gente lo ve muy cercano, lo ve muy de nosotros
