Leo Messi fue mejor que Cristiano Ronaldo durante los 45' que coincidieron en el campo y Argentina se acercó más a la portería rival que Portugal durante los 90', pero en el 91' el joven Guerreiro aprovechó de cabeza un gran servicio de Quaresma para dar el triunfo a la selección de Fernando Santos en el amistoso de lujo que se disputó en Old Trafford. El Tata Martino tiene trabajo.
Argentina entró antes en el partido de la mano de Leo Messi, muy activo conduciendo los ataques de su selección desde la banda derecha. En el 5', tras un robo de balón en las inmediaciones del área, ya asistió a Di María, que disparó desviado por muy poco. Y en el 11', tras otra conducción vertiginosa, remató al poste con la derecha sin apenas ángulo tras una pared con Biglia. La conexión del barcelonista con el lateral diestro Roncaglia hizo daño a la defensa lusa.
En el 32' Messi optó por la potencia en lugar de elegir la colocación en una falta al borde del área provocada por Pastore e ideal para un zurdo. Se le fue alta. Hasta el descanso se incrementó la dureza. Ansaldi y Joao Moutinho vieron una amarilla de la que se libró Cristiano por un ‘remate' que conectó en el brazo de Biglia y no con el balón.
En la segunda parte, Gerardo Martino y Fernando Santos se cargaron la batalla de cracks al sentar a Messi y Cristiano, con lo que comenzó otro partido. En esa fase la voz cantante la siguió llevando Argentina, con llegadas de Di Maria e Higuaín que resolvió Beto sin excesivos problemas o con dos cabezazos desviados de Gaitán y Biglia tras dos medidos pase largos de Mascherano, capitán en la segunda parte tras la marcha de Leo.
Portugal mejoró con el ímpetu de Quaresma, en gran forma. Casi habilita a Eder en el 89' y en el 91' aprovechó un rechace para centrar al área, donde apareció el joven lateral zurdo Raphael Guerreiro para lograr el gol de la victoria de Portugal con un cabezazo en plancha
MD