La actividad manufacturera de China, segunda economía mundial, se contrajo en enero, la primera vez que cae por debajo de la barrera de los 50 puntos desde octubre de 2012, lo que eleva la presión a la baja sobre la economía del gigante asiático.
Según datos publicados hoy por la Oficina Nacional de Estadísticas de China, el Índice Gerente de Compras (PMI, en sus siglas en inglés), indicador de la actividad de la industria, se situó en 49,8 puntos en enero, 0,3 por debajo del registrado en diciembre.
El organismo estadístico chino divulgó también las cifras del PMI del sector no manufacturero (indicador de la actividad del sector servicios y de la construcción), que cayó con respecto a diciembre, al situarse en 53,7 puntos por debajo de los 54,1 del mes anterior.
La bajada de la industria china se produce después de llevar cinco meses frenándose, aunque sin bajar nunca del límite de los 50 puntos, que indica contracción.
Zhao Qinghe, estadista del organismo que publicó hoy los datos, atribuyó la caída a las próximas vacaciones del Festival de la Primavera -el Año nuevo chino, que se celebrará a mediados de febrero- y a factores "de temporada" ya que, recordó, la actividad siempre baja en este momento del año.
La bajada de los productos básicos y la débil demanda del mercado también contribuyeron a la caída, añadió Zhao.
El PMI manufacturero es el resultado de las encuestas mensuales efectuadas a una muestra de 3.000 empresas de 31 categorías industriales diferentes a las que pregunta, entre otros, sobre su producción, nuevos pedidos, exportaciones, empleo o expectativas de negocio.
En cuanto a tamaño de las compañías encuestadas, el PMI de las grandes empresas se situó en 50,3 puntos en enero, por debajo de los 51,4 de diciembre, aunque manteniéndose en expansión.
Las empresas de tamaño medio avanzaron a 49,9 puntos en enero, 1,2 más que el mes anterior pero continuando en un periodo de contracción.
Las pequeñas, por su parte, mostraron una ligera recuperación al situarse en 46,4 puntos, por encima de los 45,5 de diciembre, según la fuente oficial.
Los datos de la industria china añaden más presión sobre la ralentizada segunda economía mundial, que creció un 7,4 por ciento en 2014, el menor incremento en 24 años, por debajo del objetivo de las autoridades.
A pesar de estos datos, el Gobierno chino intenta disipar las preocupaciones sobre "un frenazo brusco" de su economía y asegura que ahora lo importante es la creación de empleo y no el crecimiento a doble dígito que antaño les llevó a la cima.
EFE