El Relator Especial de la ONU sobre la Extrema Pobreza advirtió hoy que este mal aún no está en la mira de muchos de los encargados de formular políticas en Chile, pese a la impresionante gama de programas que el país ha adoptado para luchar contra él.
Al concluir una visita oficial, Philip Alston afirmó que Chile es un modelo para la región de América Latina en cuanto a su compromiso con los derechos humanos, su elevada tasa de crecimiento económico y sus innovaciones sostenidas en materia de política social.
Sin embargo, recalcó que continúa tolerando niveles de pobreza y desigualdad demasiado elevados para un país miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El experto añadió que las persistentes desigualdades resultan en una sociedad altamente segregada, en la que áreas residenciales, establecimientos educacionales y mercados de trabajo separados sirven para arraigar el privilegio y asfixiar la movilidad.
Con relación a los derechos de los pueblos indígenas del país, Alston dijo que representan el 'Talón de Aquiles' porque siguen sufriendo la exclusión, la marginalización y la discriminación.
El experto consideró que los esfuerzos por eliminar la extrema pobreza en Chile no podrán tener éxito sin un enfoque concentrado en la situación de los pueblos indígenas.