El gobierno de Vanuatu, Joe Natuman, y la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) para ese país, pidieron este martes a la comunidad de donantes internacionales 30 millones de dólares para brindar asistencia humanitaria a la población damnificada por el ciclón Pam.
El fenómeno, de categoría 5, azotó el archipiélago de Vanuatu hace once días, causando gran destrucción a la infraestructura pública, las viviendas y los medios de vida de un país donde más del 70% de la población practica la agricultura de subsistencia.
Pero en este momento, lo más urgente es la ayuda de emergencia, explicó el portavoz en Ginebra de OCHA, Jens Laerke.
"La prioridad de la petición de recursos es proveer asistencia vital como alimentos, agua, cuidados médicos y albergue en todas las áreas afectadas…también hay que ayudar a la población a recuperar sus medios de vida y a reestablecer los servicios básicos, como la salud", apuntó Laerke.
Según una evaluación de los expertos de la ONU y el gobierno de Vanuatu, 166.000 habitantes precisan asistencia urgente. El archipiélago tiene una población aproximada de 250.000 habitantes.