Varios estados del oeste y del norte de México siguen en alerta roja por fuertes vientos y lluvias a pesar de que el huracán Patricia se degradó hoy a tormenta tropical mientras sigue avanzando por el país, recordó Protección Civil.
El organismo declaró la alerta roja (peligro máximo) en el centro y norte del estado de Jalisco, en todo Nayarit, en el sur de Durango, el centro y sur de Zacatecas y Aguascalientes y en las islas Marías y Marietas, también en el norte y centro de Michoacán y en todo Colima, si bien en fase de alejamiento.
La alerta naranja (peligro alto) se decretó en el norte de Zacatecas, el sur de Nuevo León, de Coahuila, de Tamaulipas y el centro de Durango, así como en el sur de Sinaloa, el oeste de Guerrero y el resto de Michoacán, aunque en alejamiento.
Se estableció alerta amarilla (peligro moderado) en el norte de Nuevo León y de Durango, centro de Coahuila, el norte y centro de Tamaulipas, el centro de Sinaloa y el centro y oriente de Guerrero.
El huracán Patricia se degradó en pocas horas de categoría 5 en la escala Saffir-Simpson, con la que tocó tierra en México el viernes, a tormenta tropical este sábado, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
En su reporte de las 07.15 hora local (12.15 GMT), el SMN indicó estimó que el ciclón originará “lluvias de muy fuertes a intensas en el noreste y occidente de México, así como rachas de viento y oleaje elevado en los estados del Pacífico Central y noreste del país”.
Según el SMN, el meteoro se sitúa ahora 55 kilómetros al noreste de Zacatecas y a 165 kilómetros al oeste-suroeste de Matehuala (San Luis Potosí), y avanza con dirección nor-noreste a 33 kilómetros por hora con vientos sostenidos de 80 kilómetros por hora y rachas de 110.
Patricia, que ha sido considerado el huracán más poderoso de la historia reciente del país al llegar a tener vientos sostenidos de 325 kilómetros por hora, no ha causado víctimas mortales ni grandes daños materiales.
Jalisco “no baja la guardia”
El estado mexicano de Jalisco, por el que penetró el huracán Patricia, permanecía hoy en alerta, a pesar de que ahora parece menor la amenaza del ciclón, considerado el más potente de la historia reciente del país con rachas de viento de hasta 400 kilómetros por hora.
El ojo del huracán tocó tierra en las inmediaciones de la localidad de Emiliano Zapata, en Jalisco, pero por ahora solamente se ha informado de la caída de árboles, lluvias muy intensas y fuerte oleaje, aunque en los vecinos estados de Colima y Michoacán, más al sur, se han registrado daños en casas y cortes del suministro eléctrico, además de haber vehículos varados.
Por ahora no ha habido víctimas, aunque sí miles de evacuados, muchos de ellos turistas que disfrutaban de sus vacaciones en la costa este mexicana.
En Puerto Vallarta, el balneario de Jalisco por el que se esperó hasta el último momento que entrara el huracán, miles de turistas y habitantes de zonas en riesgo fueron evacuados a albergues habilitados por el Gobierno del estado.
El resultado fue que la ciudad, normalmente bulliciosa y colorida, presentaba el viernes por la noche un aspecto fantasmal, con todos los comercios cerrados y escasa circulación de vehículos, situación que se repitió en el vecino estado de Nayarit, donde se encuentra la zona turística de Riviera Nayarit.
En Jalisco, al igual que en Colima y Nayarit, los más amenazados por la trayectoria del ciclón junto con Michoacán, se suspendieron las clases en los colegios y los puertos fueron cerrados a la navegación marítima.
Cihuatlán y Cabo Corrientes, en Jalisco, fueron los lugares más afectados por los fuertes vientos, pues las casas de la zona están hechas con materiales muy endebles, lo que provocó el desprendimiento de algunos techos.
En una rueda de prensa celebrada en las últimas horas en Puerto Vallarta, el gobernador del estado, Jorge Aristóteles Sandoval, pidió a la población “no bajar la guardia”, ya que “las ráfagas de viento siguen generando problemas”.
“En estos momentos, incluso, tenemos sin luz algunos municipios, parte de Cihuatlán, Cabo Corrientes. Quiero decirles que en cinco municipios tenemos 1.200 personas albergadas, desde Cihuatlán, Cuautitlán, La Huerta, Villa Purificación y Cabo Corrientes”, agregó.
Por ahora, en Puerto Vallarta no se han sentido los potentes vientos del huracán, aunque sí ha habido fuerte oleaje en las playas y copiosas lluvias que han anegado algunas calles.
Fuente: EFE