Tras los últimos hechos de terrorismo por parte del denominado Estado Islámico (EI) a Rusia, el panorama político, social y económico se ha convertido en una montaña de consecuencias radicales que determinarán las relaciones entre Turquía y el país europeo.
Una de las principales represalias de Rusia contra Turquía, será tomar medidas en el ámbito económico lo que pondría en vilo en las relaciones estratégicas de ambas naciones.
Por lo que el presidente turco, Tayyip Erdogan, respondió a las acusaciones rusas de que los turcos habían comprado petróleo y gas al Estado Islámico en Siria, acusando al presidente sirio Bashar al-Assad y sus defensores, que incluyen a Moscú, de ser la real fuente del poder financiero y militar del grupo.
Por otro lado, el primer ministro ruso, Dmitry Medvedev, ordenó a su gobierno que elaboremedidas que incluyan congelar algunos proyectos de inversión conjunta y restringir importaciones de alimentos de Turquía.
Mientras que el ministro de Economía Alexei Ulyukayev dijo que Moscú podría poner límites a los vuelos hacia y desde Turquía, detener los preparativos para una zona de libre comercio conjunta y restringir proyectos de perfil alto como el gasoducto TurkStream y una central nuclear de 20.000 millones de dólares que Rusia está construyendo en Turquía.
“Somos socios estratégicos (…) ¿’Podrían frenarse proyectos conjuntos, cortarse vínculos’? ¿Esas iniciativas son propias de políticos?”, dijo Erdogan en un discurso en Ankara.
Ataque desmedido e irracional contra Rusia
En este orden de ideas, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, calificó de “absolutamente inexplicables los golpes por la espalda, a traición”, por parte de un país al que consideraba un aliado en la lucha contra los militares del Estado Islámico.
Putin, exigió hoy a Turquía disculpas y castigo a los responsables del derribo del bombardero ruso Su-24 que participaba en una misión antiterrorista en Siria el pasado 24 de noviembre.
Según Putin, el avión fue alcanzado a un kilómetro de la frontera de Turquía y se estrelló luego a cuatro kilómetros de ella.
Por otro lado, en Ankara, el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu justificó la decisión de derribar el avión de combate ruso por el “deber” de defender las fronteras de Turquía.
Por su parte el presidente turco Recep Tayyip Erdogan dijo que el caza ruso fue derribado como una “reacción automática” a la violación del espacio aéreo turco, en línea con las órdenes de los militares.
Rusia parte de una coalición “única”
Por otro lado, después del atentado a París el pasado 13 de noviembre, el presidente de Francia, François Hollande, anunció que se reuniría con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su homólogo Vladimir Putin, para crear una coalición única que les permitiera acabar con el denominado Estado Islámico.
A partir de dichas reuniones, el país europeo occidental ha tomado cada vez más un papel protagónico en cuanto acciones defensivas y de ataque contra el EI.
Por lo que, el jefe de Estado de esa nación pidió trabajar cada vez más con el país francés yrealizar planes y acciones conjuntas por mar y tierra para atacar al EI.
De igual forma, El presidente estadounidense, Barack Obama, y su homólogo Vladimir Putin, se reunieron durante la conferencia de la COP21 en París durante la cita del G20 donde platicaron sobre sus posiciones sobre la guerra en Siria y luego junto al resto de los colegas del G20 prometieron actuar contra los “terroristas extranjeros”.
Otro de los motores principales de Rusia para atacar el EI se prendió cuando la aeronave de la compañía MetroJet (Kogalymavia) se estrelló en la península egipcia del Sinai con 224 personas a bordo.
Las autoridades de Estados Unidos y el Reino Unido consideraron que una bomba fue colocada en la bodega pudo ser la causante que se estrellara el avión de la compañía rusa MetroJet que volaba de la localidad egipcia de Sharm El Sheij a San Petersburgo.
En este sentido, el portavoz del primer mandatario, Dmitri Peskov, informó que Rusiaencontrará y castigará a los culpables del atentado, ocurrido el pasado 31 de octubre sobre el Sinaí egipcio.
Tras todas estas acciones de terrorismo, Rusia lanzó un ataque contra las posiciones del Estado Islámico (EI) en Siria después de que el presidente ruso, reconociera que el siniestro del Airbus en el que regresaban turistas rusos de Egipto se debió a un atentado terrorista.
De igual forma, se han ordenado a los servicios especiales de esa nación que tomen las medidas necesarias para capturar a todos los terroristas involucrados en los hechos de terrorismo y “exterminarlos a todos”
Según lo establecido en el artículo 51 del Estatuto de las Naciones Unidas, (…) donde emite que“todas sus acciones en la lucha contra el terrorismo, en estricto cumplimiento con las normas y principios del derecho internacional”.
Siria una nación destruida por el terrorismo
No conforme con los consecutivos hechos de terrorismo que el denominado Estado Islámico ha causado en diferentes ciudades del mundo y las millones de muertes que han causado en su misma nación, este jueves el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, afirmó que Turquía derribará cualquier avión que viole su espacio aéreo, tal como sucedió el pasado martes cuando una aeronave turca F16 derribó al avión bombardero ruso Sukhoi 24 (SU24).
“Si hoy tuviera lugar exactamente la misma violación de nuestras fronteras aéreas responderíamos de la misma manera”, dijo el Mandatario.
Erdogan, agregó que no pedirá disculpas a Rusia por la acción contra el SU24.
Siria enfrenta una crisis desde 2011 por la acción armada del grupo terrorista autoproclamado Estado Islámico, que arremete contra el patrimonio del país y los civiles, quienes se han visto obligados a desplazarse a otras naciones. A la fecha, se estiman 250.000 víctimas y más de 4 millones de refugiados.
Rusia, que ha insistido en su llamado a avanzar en la búsqueda de una solución pacífica conjunta para contribuir a la resolución de la crisis en Siria, sim embargo, en septiembre pasado inició ataques aéreos contra posiciones tomadas en la nación asiática por organizaciones terroristas como el autodenominado Estado islámico y el llamado Frente al Nusra, vinculado a Al Qaeda.
La operación antiterrorista rusa en territorio sirio se realiza en coordinación con el Gobierno del presidente de esa nación árabe, Bashar Al Assad.