La presidenta suspendida de Brasil, Dilma Rousseff,denunció que el gobierno del mandatario interino, Michel Temer, “le quiere prohibir viajar por el país porque es una persona incómoda”.
Rousseff aseguró que la decisión fue tomada hoy por el Ministerio de Presidencia y pretende impedirle que efectúe cualquier viaje en avión oficial, con la única excepción de los trayectos entre Brasilia y Porto Alegre, capital de Río Grande del Sur (sur) y donde tiene su residencia particular.
“Es un escándalo que no pueda viajar a Río, a Ceará o a Pará. Eso es grave”, dijo Rousseff en un discurso en la Asamblea Legislativa de Porto Alegre con motivo de la presentación en esa ciudad del libro “La resistencia al golpe de 2016″.
La mandataria, apartada de sus funciones el pasado 12 de mayo, dijo que la Constitución le impide, por motivos de seguridad, tomar un vuelo comercial, a pesar de lo cual aseveró: “yo voy a viajar”.
Con información de EFE