Un estudio realizado por científicos británicos asegura que se podría salvar la vida de cientos de miles de recién nacidos si todas las mujeres embarazas fueran sometidas a pruebas de sífilis.
Los investigadores examinaron los casos de 41.000 mujeres de todo el mundo y concluyeron que con la realización de exámenes de esta enfermedad y la administración de antibióticos se podría reducir significativamente el número de fallecimientos.
El precio de las pruebas para detectar la sífilis se calculó en menos de US$1,5 por mujer.
Medio millón de recién nacidos mueren a consecuencia de la sífilis cada año, la mayoría de ellos en África subsahariana.