(AP) — Un guatemalteco fue detenido como sospechoso de participar en la emboscada en la que fue asesinado a tiros, el 9 de julio, el trovador argentino Facundo Cabral.
La fiscal general Claudia Paz informó que Juan Hernández Tánchez, de 45 años, es el tercer presunto sicario apresado con relación al ataque contra el artista.
El vocero de la policía, Donald González, indicó que el sospechoso fue detenido al realizar una serie de allanamientos en la ciudad de Escuintla, a unos 40 kilómetros al sur de la capital, planificados con el objetivo de aprehender a Hernández y a otro sospechoso que todavía no ha sido localizado.
El ministro de Gobernación, Carlos Menocal, dijo a la AP que “Hernández integra una estructura de sicarios que trabajan con el crimen organizado, particularmente el narcotráfico que opera en el área de Escuintla”.
Cabral murió cuando fue atacado junto al nicaragüense Henry Fariñas, un empresario de clubes nocturnos de entretenimiento para adultos, quien se había ofrecido a trasladar al artista argentino desde su hotel hasta el aeropuerto de la capital guatemalteca para abandonar el país.
En el trayecto, tres automóviles se aparejaron al de Fariñas y desde estos, atacantes dispararon fusiles de asalto contra la camioneta agrícola de Fariñas, quien resultó herido de gravedad.
Las autoridades guatemaltecas sostienen que el empresario nicaragüense era el blanco del ataque, que habría tenido relación con el narcotráfico y que la muerte del músico fue una tragedia resultante de esa vendetta. Han dicho que el crimen fue ordenado por un “centroamericano” conocido únicamente como Alejandro.
Dos días después de la emboscada fueron arrestados los primeros dos sospechosos, quienes también son guatemaltecos.