La unión de cajas de ahorro españolas, Banca Cívica, fijó el precio de su acción en 2,7 euros para su salida a bolsa el jueves, obligada --como Bankia que cotiza desde este miércoles-- a efectuar un fuerte descuento, de un 60% aproximadamente, por la presión de los mercados.
Estas dos salidas a bolsa serán un examen para medir la confianza de los inversores hacia España y su sector bancario, sobre todo el de las cajas de ahorro, consideradas el eslabon débil de su sistema y cuyo funcionamiento atípico (entidades regionales, hasta ahora ausentes en bolsa, a menudo controlada por los poderes públicos ) despierta todavía reelos.
El precio de la acción de Banca Cívica es resultado de un descuento del 60% respecto a su valor contable y por debajo de la horquilla inicialmente anunciada (2,7 a 3,8 euros por acción).
En un comunicado, la unión de cajas de ahorros, nacida en el 2010 con la fusión de Caja Navarra, Cajasol, Caja de Burgos y CajaCanarias, precisó que la demanda de inversores institucionales fue de 1,32 veces la oferta y que la de los pequeños inversores fue de 2,26 veces, con un total de 1.100 millones de euros en solicitudes.
Con la acción a ese precio, Banca Cívica debería captar 671,8 millones de euros, mientras que con un precio de 3,7 euros, la horquilla máxima, habría recogido 945,5 millones.
Su capitalización bursátil será de 1.300 millones de euros (la nueva entidad coloca 47,5% de su capital en Bolsa).
Bankia, la mayor unión de cajas de ahorro española, también se vio obligada a un fuerte descuento para su salida a bolsa, prevista para el miércoles al mediodía: fijó el precio de su acción en 3,75 euros, con un descuento de más del 60% respecto a su valor contable y por debajo de la horquilla inicial (4,41 a 5,05 euros).
Bankia será el cuarto banco en el sector español, detrás de Santander, BBVA y CaixaBank, lo que le asegura un sitio en el índice Ibex-35 de los principales valores.
Las dos salidas a bolsa tienen lugar pocos días después de publicarse los resultados de las pruebas de resistencia bancaria europeas: este año Madrid registró la mayoría de rechazos, con cinco entidades que no superaron las pruebas de un total de ocho.
España se presentó a estas pruebas con el 95% de su sector bancario, contra el 65% de la media de la Unión Europea (UE).
Bankia y Banca Cívica no resultaron aplazadas pero formaron parte de otras siete entidades que pasaron raspando, con un nivel de fondos duros entre el mínimo exigido (5%) y 6%.
España puso en práctica un vasto plan de reestructuración de su sector bancario, imponiendo ratios de solvencia más elevados y fusionando las cajas de ahorro, eslabón débil del sistema financiero del país por su gran exposición al estallido de la burbuja inmobiliaria.
Para fortalecerse, el sector debe buscar capitales privados de aquí a septiembre, lo que incitó a algunas cajas a salir a bolsa o pedir asistencia pública.
AFP
