El gobierno laborista de la primera ministra Julia Gillard consiguió que el Senado aprobara el paquete de 18 medidas por las que a partir del 1 de julio de 2012, cerca de 500 empresas tendrán que pagar casi US$24 por cada tonelada de dióxido de carbono que emitan a la atmósfera.
La presión irá aumentando hasta julio de 2015, cuando entrará en vigor un sistema de comercio de emisiones similar al de la Unión Europea.
Australia es el país del mundo industrializado que más gases de efecto invernadero emite por habitante. En términos absolutos, el país es responsable del 1,5% de la emisión global.
La economía australiana depende en gran parte de las exportaciones del sector minero, cuya patronal se ha opuesto a los planes gubernamentales desde el principio.
BBC