Una mujer transexual y un hombre gay han tomado asiento en el recién elegido parlamento de Polonia, como resultado de las pasadas elecciones de octubre en las que el partido liberal Plataforma Ciudadana, liderado por el primer ministro Donald Tusk, obtuvo una victoria que le permitirá repetir mandato al frente del país.Por primera vez en la historia el Parlamento polaco contará con una diputada transexual, Anna Grodzka, además de un diputado abiertamente homosexual, Robert Biedroń. Ambos diputados son miembros del Movimiento Palikot, que resultó una sorpresa en estos comicios en los que debutó con un diez por ciento de los votos.
Este partido, con un planteamiento liberal y marcadamente anticlerical, es el responsable de que Grodzka, de 57 años, haga historia en la católica Polonia al convertirse en el primer transexual que consigue un escaño en su Parlamento.
El diputado Robert Biedron, que también pertenece al Movimiento Palikot, consideró que estos cambios son “señal de que nuestra sociedad está evolucionando y somos más abiertos y tolerantes”.
Anna Grodzka, que nació siendo hombre, estrechó las manos de varios hombres y mujeres cuando ingresó al salón de actos y posteriormente se sentó al lado de Robert Biedron.
El Movimiento Palikot se ha comprometido a impulsar la causa liberal. Se opone al poder de la Iglesia en la sociedad, promueve los derechos de gays y quiere desafiar a la prohibición casi total de Polonia sobre el aborto.
La sesión parlamentaria fue inaugurada por Jozef Zych, un expresidente del Parlamento, que invocó las palabras pronunciadas por el difunto Papa polaco Juan Pablo II y agradeció la presencia de los arzobispos y otros líderes religiosos que observaron la ceremonia de apertura de un balcón.
Tras la constitución del hemiciclo, el presidente de Polonia, Bronislaw Komorowski, aceptará la dimisión del Gobierno saliente y confiará oficialmente la misión de formar Ejecutivo a Tusk, quien deberá presentar la composición del nuevo gabinete antes del 22 de noviembre.
Durante la sesión inaugural, Komorowski recordó en un discurso que “sólo la acción valiente y prudente” de los parlamentarios y del Gobierno de Polonia asegurará el desarrollo económico estable de Polonia, único país de Europa que en 2009 consiguió evitar la recesión.
Komorowski subrayó que “el desarrollo económico sostenible debe basarse en la creatividad y la innovación, así como en la capacidad de competir de manera efectiva a través de la interacción y colaboración”.
El jefe del Estado polaco también se refirió a la crisis demográfica que vive Polonia y el conjunto de la Unión Europea, algo que definió como uno de los principales retos a los que habrá de enfrentarse la sociedad del continente en los próximos años.
Con información de The Guardian y EFE
