La Policía brasileña investiga una posible asociación de las mafias que
controlan el juego ilegal en Río de Janeiro con organizaciones criminales de
Rusia e Israel para abrir casinos en países como Argentina, Ecuador y Uruguay,
informó hoy el diario O Globo.
La asociación con otras mafias
para invertir en casinos legales en países de América Latina al parecer fue el
camino encontrado por las organizaciones criminales de Río de Janeiro para lavar
los recursos obtenidos ilegalmente en Brasil, según fuentes de la
Policía Federal brasileña citadas por el diario.
El blanco de la
investigación son los "bicheiros", como son conocidos los banqueros del "bicho",
una lotería ilegal muy popular en Río de Janeiro y que utiliza animales en lugar
de números, y los propietarios de las máquinas tragaperras que, pese a estar
prohibidas, se encuentran en decenas de bares de Río de
Janeiro.
Los "bicheiros", algunos muy conocidos por ser
mecenas de las escuelas de samba que cada año animan con sus desfiles el famoso
Carnaval de Río de Janeiro, han sido vinculados en diferentes ocasiones
a otros crímenes, como narcotráfico, prostitución, contrabando, corrupción y
homicidios.
Según la versión periodística, para poder invertir
sus recursos ilegales en países en donde los casinos no son prohibidos, los
"bicheiros" se asociaron con mafias como la israelí Abergil y la rusa Bratva,
especialistas en operaciones de lavado de dinero, evasión de divisas y
contrabando.
Estos grupos son acusados por la Policía brasileña de vender
a las mafias del juego ilegal de Brasil placas electrónicas usadas en los
tragaperras, armas y hasta explosivos.
Según los policías consultados por
O Globo, los indicios de asociación de los "bicheiros" con casinos en el
exterior surgieron de investigaciones sobre remesas de dinero de estas mafias a
cuentas en el exterior, principalmente en Uruguay y Panamá, que están vinculadas
a diferentes hoteles-casino en Suramérica.
Las investigaciones sobre
lavado de dinero y remesas ilegales a cuentas en el exterior por parte de las
mafias cariocas ya han permitido a la Policía incautarse de cerca de 500
millones de reales (unos 277,8 millones de dólares) en lujosos inmuebles en Río
de Janeiro, hoteles, haciendas, vehículos y yates, según O Globo.
Según
la versión periodística, los contactos entre las mafias extranjeras y las
brasileñas fueron intermediados por el israelí Yoram El Al, supuestamente
vinculado a la Abergil y al que se le atribuyen nexos con mafiosos como Meir
Zloff, Tal Amir, Genrich Birman y Vitaly Okorov, todos acusados de diferentes
delitos.
Yoram El Al, agrega el diario, entró por primera vez en Brasil
en 2006, cuando ya existían en su contra órdenes de prisión expedidas por jueces
en Estados Unidos y en Uruguay por remesas ilegales de dinero, y está preso en
Río de Janeiro.
La Policía cuenta con grabaciones legales de cerca de
21.000 conversaciones telefónicas entre los "bicheiros" y representantes de las
mafias internacionales. EFE