EFE- El Gobierno Nacional pretende combatir los
altos índices de inseguridad, mediante un nuevo proyecto social que prevé crear
un nuevo código penal, reformar el currículum escolar y vigilar el
sensacionalismo en los medios de comunicación.
El ministro del Interior,
Tareck el Aissami, precisó los detalles de la nueva Gran Misión Seguridad -aun
sin fecha de lanzamiento- al tiempo que dijo que no se puede responsabilizar
exclusivamente al presidente Hugo Chávez de la problemática.
El nuevo
proyecto social se basará, precisó El Aissami, en siete puntos: atención a los
procesos de socialización, prevención social, reforma policial, reforma
judicial, creación de un mapa del delito, operación desarme y apoyo a los
investigadores.
El Ejecutivo pretende fortalecer los núcleos familiares,
reformar el currículum escolar subrayando aspectos como "la moral, luces y
respeto a la autoridad" y vigilar también el rol de los medios de comunicación,
indicó.
"No se trata de que los medios censuren la verdad, sino derrotar
el criterio perverso del uso sensacionalista del crimen para fines lucrativos.
Debe entrar el tema de la ética del medio", explicó el ministro.
También
contempla seguir adelante con la actual reforma policial con especial hincapié
en la refundación del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y
Criminalísticas (Cicpc).
"Se trata de crear una nueva institución.
Actualmente desarrolla actividades distintas a su función de esclarecer hechos
delictivos. Hay que adecuarla al orden jurídico existente. No debe efectuar
labores de patrullaje o de custodia de internos (en los penales),
dijo.
Un nuevo código penal se unirá a la "municipalización de la
justicia", siguió El Aissami, para crear jueces de paz y codificar conductas
incívicas hasta ahora no tipificadas para sancionarlas a través de "multas,
barrer las calles o atender una charla familiar".
Por otro lado, el
Ejecutivo prevé realizar un mapa del delito y del entorno físico que incide en
la perpetuación del crimen, así como un registro nacional de las organizaciones
que atienden a personas con conductas delictivas así como profundizar el desarme
de la población.
"Aquí ninguna persona, actor político puede pararse y
responsabilizar al presidente Hugo Chávez de un problema que tiene
corresponsabilidad en todos los ámbitos, desde la familia hasta las
instituciones de control social, poderes públicos, gobernadores, alcaldes, ONG,
la Iglesia, los medios de comunicación", consideró El Aissami.
La
inseguridad es uno de los principales problemas en Venezuela, donde el Gobierno
ha admitido no haber logrado romper el "piso duro" de 48 muertes por cada
100.000 habitantes.
Chávez propuso el pasado día 13 crear una misión para
dar respuesta a este "doloroso" y "lamentable" problema.