La ola de calor que azotó la semana pasada numerosas áreas de Japón, con temperaturas de más de 35 grados centígrados, dejó 13 muertos y cerca de 5.500 hospitalizados en esos siete días, informó hoy la Agencia nipona de Gestión de Desastres.
En total tuvieron que ser trasladadas en ambulancia y hospitalizas 5.467 personas, más del doble que en la semana precedente, en la que se registraron 2.622 ingresos, en un mes de julio en el que se han registrado temperaturas récord en diversas zonas del archipiélago.
De los hospitalizados el 45,9 por ciento fueron mayores de 65 años, el 39,5 por ciento adultos y el 13,6 por ciento adolescentes, según el informe preliminar de la agencia nipona.
El lunes de la semana pasada 60 de los 927 centros de observación meteorológica del país registraron temperaturas de más de 35 grados centígrados, lo que llevó a la Agencia de Meteorología a pedir a la población que extremase la precaución ante la ola de calor, que se prolongó durante toda la semana.
En zonas como las provincias de Gunma y Saitama, al norte de Tokio, el mercurio sobrepasó los 37,5 grados y los 36,4 grados, respectivamente, mientras que al suroeste, en la provincia de Tottori, alcanzó los 36,8 grados.
De entre los fallecidos, el pasado martes un hombre de 80 años fue encontrado muerto en un campo de labranza de la provincia noroccidental de Niigata, mientras una mujer de 37 años murió tras sufrir una parada cardiopulmonar y caer en un río de Tokio, detalló la agencia Kyodo.
Esta semana las altas temperaturas darán una pequeña tregua en Japón ya que se prevén nubes en gran parte del archipiélago y temperaturas máximas, para mañana, de 35 grados en Takamatsu y Osaka (centro).
EFE