El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi aseguró hoy que a su sucesor en el cargo y actual jefe del Gobierno de Italia, Mario Monti, no le interesa concurrir a las elecciones generales de 2013 porque pasará de interpretar el papel de "dios" al de un "pequeño protagonista".
En una nueva comparecencia en la intensiva ronda por los medios que lleva a cabo desde hace días, Berlusconi arremetió por primera vez contra la que parece que se postula como fórmula que Monti utilizará para ser candidato a la Jefatura del Gobierno, el apoyo de las formaciones centristas, entre ellas la del presidente de Ferrari, Luca Cordero di Montezemolo.
"Me quedaría absolutamente sorprendido si Monti participara de modo directo en la campaña electoral. Creo que a Monti no le interesa convertirse en un pequeño protagonista de la política junto a otros pequeños protagonistas, frente al papel de 'deus ex machina' con el que se presentó" hace un año, afirmó el ex primer ministro italiano, en declaraciones a Radio Anch'io.
Berlusconi abordó además el encuentro que Monti mantuvo ayer en Roma con los líderes de los movimientos centristas que le han pedido que se presente a las elecciones en los últimos meses y que, según el diario "La Repubblica", serán quienes sustentarán su candidatura a primer ministro en los comicios que previsiblemente se celebrarán el 24 de febrero.
"El gran centro es un aliado oculto de la izquierda. No podrá nunca tener los votos para gobernar, por lo que a los electores les sale casi más a cuenta votar a la izquierda que a estos ocultos aliados de la izquierda", comentó el empresario.
"Si se divide el frente de los moderados y se da la victoria de la izquierda, el único resultado que tendrán los 'partidillos' del centro será el de apoyar la victoria de la izquierda. Estos 'partidillos' se ofrecerán para colaborar con la izquierda para intentar participar en esta 'comida'", añadió.
Berlusconi, quien había prometido no presentarse a las elecciones si Monti accedía a liderar el centroderecha, se mostró dispuesto a participar en un debate en televisión con el primer ministro tecnócrata o con el candidato del centroizquierda y líder del Partido Demócrata (PD), Pier Luigi Bersani.
"El 'cara a cara' en televisión con (Pier Luigi) Bersani o con Monti soy yo el primero que lo pide. Si es hecho con las reglas adecuadas, creo que es una cosa muy positiva para hacer entender qué quiere cada uno de estos contendientes. Espero poder hacer más de uno. No tengo problemas. Estoy absolutamente dispuesto", apuntó.
En términos de propuestas electorales, Berlusconi, quien pidió a la Iglesia Católica que, a la hora de posicionarse en los comicios, se acuerde de todo lo que ha hecho por ella, atacó las reformas llevadas a cabo por el Ejecutivo de Monti, que, según él, han elevado la presión fiscal en Italia.
"No se debe continuar por el camino del aumento de la presión fiscal: este año, con este Gobierno, ha aumentado dos puntos porcentuales. Es necesario ir por el camino opuesto, con la ayuda de las empresas, a las que hay que tasar menos e imponer menos requisitos burocráticos", afirmó el ex primer ministro.
"Hay que cambiar la política económica enteramente -dijo-. La política de la austeridad lleva a la recesión y a la depresión. Hoy las empresas en su gran mayoría tienen problemas de liquidez y pagan con retraso a los proveedores, también porque el Estado paga con retraso. Es el Estado el que en primer lugar enciende la mecha de esta situación de retrasos que lleva a la crisis a las empresas".
EFE