El presidente de Rusia, Vladímir Putin, aseguró hoy que los rumores y las informaciones sobre su estado de salud responden a un intento de "poner en duda la legitimidad y la capacidad de trabajo de las autoridades".
"A las preguntas sobre mi salud puedo responder como siempre: esperen sentados. (Estas informaciones) interesan a la oposición política, que se esfuerzan en poner en duda la legitimidad y la capacidad de trabajo de las autoridades", respondió el presidente en la primera rueda de prensa que ofrece desde su vuelta al Kremlin.
A principios de noviembre, el diario económico Védomosti escribió que la cumbre de los miembros de la Comunidad de Estados Independientes, integrada por las antiguas repúblicas soviéticas y prevista para noviembre, era aplazada hasta el 5 de diciembre por "la imposibilidad de coordinar la agenda presidencial".
Además, otros eventos que debían contar con la participación de Putin en octubre y noviembre, incluidos sus viajes a Turquía, la India y Bulgaria, fueron pospuestos con distintos pretextos por la parte rusa, recordó Védomosti.
Sobre los problemas de la espalda del presidente ruso también habló su homólogo bielorruso, Alexandr Lukashenko, que explicó así el aplazamiento de una reunión entre ambos: "Le gusta pelear. Levantó a un chico y al lanzarlo se dañó la columna. Ocurrió en el tartán durante el judo".
Sin embargo, el portavoz de Putin, Dmitri Peskov, señaló la víspera que la propia rueda de prensa de hoy como la preparación para la misma demuestran el buen estado de salud del jefe de Estado ruso. EFE