AFP) – El sudafricano Oscar Pistorius, el atleta discapacitado que participó en los Juegos Olímpicos de Londres, rompió a llorar a su llegada este viernes a la sala de audiencias del tribunal de Pretoria, que le imputó formalmente del asesinato de su novia.
El atleta, vestido con un traje negro y una camisa celeste, no pudo evitar las lágrimas, al tiempo que se cubría la cara y posaba su mirada en el suelo mientras escuchaba los cargos contra él, constató una periodista de la AFP en el lugar.
La justicia sudafricana designó como juez a un magistrado experimentado, Desmond Nair, acostumbrado a grandes procesos, pero Pistorius no lo miró cuando el juez lo saludó. Un responsable de la fiscalía, Gerrie Nel, estaba a su lado.
Pistorius, cuya tenacidad y voluntad forjaron la admiración de millones de aficionados en el mundo, continuó sollozando, ante los ojos de una sala en la que no cabía un alfiler.
Miembros de su familia pudieron acercarse al acusado y darle palmadas en la espalda para expresarle su apoyo y tranquilizarlo.
Unas 150 personas, entre familiares y amigos, medios de comunicación, abogados y empleados del tribunal, se agolpaban en su sala prevista para 50 personas sentadas.
Sin embargo, Pistorius seguirá encarcelado tras el aplazamiento de la audiencia requerida por el magistrado, ante la que comparecía por primera vez este viernes, constató la AFP.
El juez suspendió hasta el martes y el miércoles la audiencia en la que la defensa de Pistorius pedirá su puesta en libertad bajo fianza, dando “tiempo a la defensa para investigar y estar en mejor posición en sus peticiones”, mientras que la fiscalía requerirá, según un magistrado, la recalificación de los cargos como “asesinato con premeditación”.