EFE-Dos trabajadores clandestinos de una mina de oro abandonada de Roodepoort, en la provincia nororiental sudafricana de Gauteng, han muerto tras inhalar gas metano, informó hoy el Servicio de Emergencias de Johannesburgo.
Los cuerpos de las dos víctimas mortales fueron evacuados entre la noche del lunes y la pasada madrugada, en una complicada operación en la que los servicios de rescate utilizaron máscaras antigás.
Algunas informaciones recibidas por el Servicio de Emergencias, y que están aún por confirmar, apuntan a que los dos hombres se encontraban en estado de inconsciencia desde la noche del sábado.
Cientos de mineros siguen trabajando clandestinamente sin las más mínimas condiciones de seguridad en explotaciones de la zona abandonadas por las compañías.
El año pasado, la Policía encontró muertos a dos mineros en una explotación de la zona.
Un centenar de trabajadores clandestinos han sido interrogados hasta ahora en relación con esas muertes.
La Policía sospecha que algunos de ellos son obligados por grupos mafiosos a trabajar en las minas abandonadas.
En 2012, Sudáfrica vio sacudida por numerosas huelgas violentas en el sector minero, en las que los trabajadores, muchos de los cuales viven en condiciones precarias, reclamaron mejoras salariales.