Comer champiñones contribuye a la pérdida y el mantenimiento de peso, revela un estudio realizado por investigadores de la Escuela de Salud Pública Blommberg de la Universidad Johns Hopkins (EE UU) y publicado en la revista The FASEB Journal.
Para llegar a esa conclusión, los investigadores reclutaron a casi un centenar de adultos obesos a los que se sustituyó la carne roja que comían a lo largo de la semana por una taza de champiñones diaria.
Tras un año aplicando esta sencilla medida en la dieta, los participantes habían perdido un promedio de 3 kilos y medio más que el grupo control, y mostraban mejoras en la composición corporal, con una disminución del 0,85% de la grasa total corporal.
A esto se suma que la ingesta de champiñones como sustituto de la carne les permitió reducir en 6,6 centímetros la circunferencia de la cintura, una medida que determina la obesidad abdominal, la más peligrosa dado que indica que existe acumulación de grasa alrededor de las vísceras.
RPP