Miles de ciudadanos corren el riesgo de ser "potencialmente" radicalizados en el Reino Unido, advirtió hoy la ministra de Interior, Theresa May, a raíz del reciente asesinato del soldado Lee Rigby en Londres, en cuyo caso trabajan 500 agentes.
En una entrevista concedida a la cadena pública BBC, May dijo que esas personas expuestas a influencias radicales están "en diferentes puntos del camino que podría llevarles al extremismo violento".
May dijo que 500 policías y agentes de seguridad trabajan actualmente en el caso del militar británico de 25 años, asesinado a machetazos en un barrio del sureste de Londres el pasado miércoles por dos supuestos islamistas radicales, que justificaron el crimen en nombre del Islam, lo que generó temores a represalias contra musulmanes.
Los agresores están bajo vigilancia policial en dos hospitales londinenses, donde ingresaron tras resultar heridos por disparos de los agentes.
Según la ministra, "todos los indicadores" del "horrible asesinato" del militar apuntan a que el ataque fue un incidente aislado y no formó parte de una operación más amplia.
May admitió que el Gobierno tiene que "revisar los poderes y las leyes" que pueden aplicarse en este tipo de situaciones.
El Ejecutivo de David Cameron podría imponer, además, reglas más estrictas sobre los proveedores de servicios de internet, apuntó.
La ministra defendió también el "excelente trabajo" realizado por las agencias de seguridad e inteligencia de este país ante las críticas al hecho de que los dos agresores estuvieran fichados desde hacía ocho años por el MI5.
Las declaraciones de May se producen después de conocerse que el Gobierno de David Cameron pondrá en marcha un comité especial para gestionar casos de extremismo y radicalización tras la muerte del soldado Lee Rigby, por la que ya hay otros tres detenidos, según informó hoy Downing Street.
Ese nuevo grupo, que incorporará a personal de los servicios de inteligencia y responsables policiales cuando sea necesario, se centrará en clérigos radicales cuyo objetivo sea reclutar a potenciales miembros en cárceles, colegios, facultades y mezquitas.
Agentes de la unidad antiterrorista detuvieron este sábado a otras tres personas, tres hombres de 21, 24 y 28 años, como sospechosos de conspirar para cometer un asesinato, según datos policiales.EFE