El Cuerpo de Guardianes de la Revolución de Irán ha recibido un gran número de lanzaderas de misiles tierra-tierra, con capacidad para "aplastar cualquier posible invasión enemiga", dijo hoy el ministro de Defensa, general Ahmad Vahidi.
En una ceremonia para simbolizar esta entrega de material bélico, Vahidi dijo que las lanzaderas han sido entregadas a la Fuerza Aeroespacial de los Guardianes para garantizar la seguridad del país, informó la agencia local Fars.
"El Irán islámico no quiere la guerra con nadie y nunca iniciará un conflicto, aunque tampoco permitirá que nadie le agreda o lleve a cabo acciones hostiles contra él", dijo el jefe militar.
Vahidi agregó que, en caso de ser atacada, la República Islámica de Irán "aplastará con fuerza a cualquier enemigo invasor y le hará arrepentirse de sus actos".
Ayer, el comandante del Ejército de Tierra, general Ahmad Reza Purdastan, explicó que recientemente sus fuerzas han recibido misiles antitanque específicamente preparados contra carros de combate con blindaje reactivo.
También ayer, el vicecomandante de los Guardianes de la Revolución, general Husein Salami, afirmó que "miles de misiles están listos para alcanzar objetivos enemigos en la región".
En las últimas semanas, en vísperas de las elecciones presidenciales del próximo 14 de junio, se han incrementado las declaraciones de militares iraníes contra los "enemigos", en referencia a Israel, EEUU, los países occidentales y sus aliados en las regiones de Oriente Medio, golfo Pérsico y Asia Central.
Irán está sometido a un embargo internacional de armas desde poco después del triunfo de la Revolución Islámica en 1979 y, desde entonces, ha desarrollado su propio armamento y equipos.
Con frecuencia, las autoridades de Defensa iraníes informan de pruebas de nuevo armamento y sistemas militares de fabricación nacional.
EFE