El Gobierno español estudia multar a los padres de los menores que acuden frecuentemente a las urgencias hospitalarias en situaciones de intoxicación y coma etílico, ya que se percibe como una dejación de la tutela efectiva por parte de los progenitores.
El Delegado del Plan Nacional sobre Drogas, Francisco Babín, explicó hoy a la prensa que esa propuesta se incluiría en el anteproyecto de ley que prepara el Gobierno para limitar el acceso a los adolescentes al alcohol.
Babín aventuró incluso que se podría calificar de "maltrato" el que los padres permitan a sus hijos intoxicaciones etílicas mientras vivan en el domicilio.
"No albergamos otra expectativa que la de sancionarles con una multa, con el reproche social que lleva la sanción, porque no hay urgencia de hospital de España que a lo largo del fin de semana no trate varios comas etílicos en menores de edad", aseguró Babín.
"Esto que puede suceder ocasionalmente (añadió), si se convierte en una dinámica habitual es que hay una dejación de la tutela efectiva por parte de los padres".
Además, se está estudiando introducir normas para que los menores no puedan acceder a la publicidad sobre el alcohol en internet y las redes sociales.
La legislación actual es "relativamente escasa", según Babín, con lo que internet y las redes sociales se han convertido en "un espacio de impunidad" desde el que se puede hacer apología del consumo de alcohol.
Otras medidas que se contemplan están relacionadas con el etiquetado de las bebidas alcohólicas y su disposición y disponibilidad en las superficies comerciales.
El objetivo del Gobierno es retrasar la edad de inicio del consumo de alcohol, ya que la media en España está en los 13,7 años, algo que les puede producir daños orgánicos y psicológicos,además de fracaso escolar y conflictos familiares.
Más del 75 por ciento de los menores españoles de entre 14 y 18 años consumen alcohol, un 48 por ciento de los de 14 años y un 86 por ciento de los de 18, con lo que la ingesta aumenta a lo largo de la adolescencia.
Izquierdo subrayó que hay niños que con once años ya tuvieron comas etílicos y que esto es "una barbaridad", porque además puede ir de la mano de la ingesta de otras sustancias.
EFE