A las 12:00 de la madrugada del viernes un presunto miembro de Las Águilas Negras, grupo paramilitar colombiano, y su cómplice, un joven de 25 años, causaron terror en la población de Santa Bárbara en el estado Zulia; luego de que le robaron a un hombre su moto, le dispararon y posteriormente uno de ellos tomó a una rehén por dos horas y media, mientras lo rodeaban los oficiales.
Ambos delincuentes detuvieron a un sujeto que se trasladaba en una moto por la avenida Bolívar, le dispararon dos veces, le quitaron su vehículo y huyeron.
Al herido lo trasladaron al Hospital de Santa Bárbara. Allí denunció el robo a los funcionarios de guardia y les dio las características de sus atacantes. La policía radió la novedad y comenzó la búsqueda; en la avenida 5 del sector Sierra Maestra localizaron a ambos.
El presunto paramilitar obligó a su víctima a caminar, con un explosivo en el cuello, unos tres kilómetros. La llevó desde el sector Sierra Maestra hasta el kilómetro 2 de la carretera Santa Bárbara-El Vigía. Para no agredir a la mujer exigió a la policía que le dieran una moto con el tanque lleno de gasolina y que lo dejaran ir.Uno de los delincuentes al verse rodeado se entregó sin poner resistencia, mientras que su cómplice huyó, se metió en una casa y sometió con una granada a una mujer de 35 años.
La mujer se le veía asustada, lloraba y suplicó a los oficiales del Cpez, la Policía científica, la Guardia Nacional, el Sebín y Policolón que no la dejaran morir. La desesperación de la mujer conmovió a los uniformados, quienes la siguieron durante todo su recorrido. Para colaborar con ella le gritaron a los curiosos que se alejaran. Un efectivo policial trajo la moto y luego el delincuente lanzó la granada en un terreno enmontado. Aprovechó la explosión para perderse entre el monte.
Los funcionarios iniciaron la persecución a la altura del sector La Maroma, pero el presunto “Águila Negra” les hizo frente con un arma de fuego y murió en el intercambio de disparos. Su cadáver, aún sin identificar, lo llevaron a la morgue del hospital.
La policía informó que tanto el detenido como el occiso llevan tatuados en sus brazos un águila y una estrella.
Con información de La Verdad