Nota de prensa).- Los venezolanos abarrotaron la sala del sector Polanco del Distrito Federal, para encontrarse con los parlamentarios venezolanos quellevarían el “detalle” informativo de cuanto está ocurriendo con la socioeconomía y la crisis política del país.
Sobre el compromiso de revitalizar los “comandos familiares Simón Bolívar” los venezolanos en tierra azteca darán continuidad a los esfuerzos informativos para quecírculos políticos y sociales de México conozcan sobre el diferendo electoral planteado por Henrique Capriles por vías institucionales “y la violenta respuesta del gobierno, basada en la persecución, el golpe a la Asamblea Nacional y la siembra de terror judicial contra los dirigentes opositores”
Con especial interés se abordó el tema de los golpes y amenazas a la libertad de expresión en Venezuela que, según María Corina Machado, Julio Montoya y Miguel Ángel Rodríguez, pretenden la avanzada de la hegemonía comunicacional y el ocultamiento de los altos niveles de criminalidad, de pérdida del valor del salario por el descalabro económico basado en el arrebato de la propiedad productiva y la devaluación del bolívar.
Julio Montoya advirtió que los graves señalamientos hechos por Mario Silva en el audio recientemente publicado, tienen franca relación con el sufrimiento de los venezolanos. Por ello pidió acompañamiento de la familia venezolana donde quiera que esté a la petición de una investigación seria sobre el desangramiento de dólares por presuntas mafias de figuras influyentes del gobierno, sobre los temas de conspiración y formación de bandas asesinas con armas presuntamente otorgadas por el Ministro de la Defensa, entre otros temas.
“Fe y esperanza en el camino recorrido hasta ahora y los éxitos de la perseverancia en el futuro” fue parte del mensaje clave de María Corina Machado, ante las preguntas de sus compatriotas, colmadas de incertidumbre por la “violencia” en que habría exacerbado el trato del gobierno a la disidencia política, tras la decisión de cuestionar las elecciones del 14-A y procurar la repetición de las mismas.
“Se trata de impedir que ejerzamos los derechos en nombre de la mayoría de los venezolanos. Somos mayoría. Ténganlo en cuenta. Y vamos a vencer”, dijo.
Por su parte, Rodríguez atendió interrogantes sobre la llamada por el gobierno como “guerra económica” e hizo un balance de las razones por las que la inflación y el desabastecimiento están angustiando a Venezuela: “destruyeron 7000 industrias, cerca de 50.000 empresas y arrasaron con cuatro millones de hectáreas que antes producían alimento. Todo para dar cabida a importaciones nada transparentes, caras e insuficientes, mientras la ruina embarga al productor local”.
