Los bancos británicos, golpeados ya por varios escándalos, tendrán que devolver una suma que podría llegar a los 1.300 millones de libras (2.000 millones de dólares) a millones de clientes afectados por la venta abusiva de seguros de tarjetas de crédito.
En un comunicado, la FCA (Financial Conduct Authority) anunció que las entidades implicadas son la sociedad Card Protection Plan Limited (CPP) y trece bancos, entre ellos Barclays, HSBC, Royal Bank of Scotland (RBS), Santander UK (filial británica del banco español) y una filial de Lloyds Banking Group (LBG).
Este anuncio se produce tras una larga serie de escándalos que han afectado en los últimos meses a la City. La indemnización podría beneficiar hasta a 7 millones de clientes, que compraron o renovaron 23 millones de pólizas de seguros de tarjetas de crédito.
Esos clientes habían adquirido productos de protección de sus tarjetas, o contra el robo de documentos de identidad, por un valor de 30 a 80 libras anuales. Podrán pedir en ciertos casos la devolución de sumas pagadas desde 2005, más intereses del 8%.
"Los clientes recibían informaciones falsas o poco claras sobre las pólizas con el objetivo de comprar los seguros de protección que, o bien no eran necesarios, o bien cubrían unos riesgos que habían sido sobredimensionados", explica la FCA.
Los grandes bancos y las sociedades emisoras de tarjetas de crédito habían incitado a millones de sus clientes a comprar los productos de la sociedad CPP.AFP
En un comunicado, la FCA (Financial Conduct Authority) anunció que las entidades implicadas son la sociedad Card Protection Plan Limited (CPP) y trece bancos, entre ellos Barclays, HSBC, Royal Bank of Scotland (RBS), Santander UK (filial británica del banco español) y una filial de Lloyds Banking Group (LBG).
Este anuncio se produce tras una larga serie de escándalos que han afectado en los últimos meses a la City. La indemnización podría beneficiar hasta a 7 millones de clientes, que compraron o renovaron 23 millones de pólizas de seguros de tarjetas de crédito.
Esos clientes habían adquirido productos de protección de sus tarjetas, o contra el robo de documentos de identidad, por un valor de 30 a 80 libras anuales. Podrán pedir en ciertos casos la devolución de sumas pagadas desde 2005, más intereses del 8%.
"Los clientes recibían informaciones falsas o poco claras sobre las pólizas con el objetivo de comprar los seguros de protección que, o bien no eran necesarios, o bien cubrían unos riesgos que habían sido sobredimensionados", explica la FCA.
Los grandes bancos y las sociedades emisoras de tarjetas de crédito habían incitado a millones de sus clientes a comprar los productos de la sociedad CPP.AFP