El ministro para la Vivienda y Hábitat, Ricardo Molina, denunció este lunes el esquema especulativo por el cual se rige el mercado inmobiliario en Venezuela. Señaló que los precios “exhorbitantes” e “irreales” en los que se ofertan actualmente las casas y apartamentos, forman parte de la guerra económica.
“¿Quién fija el precio de las viviendas del mercado secundario, de las viviendas usadas? Sin duda alguna, esos precios los fija la burguesía, a través de unas páginas web que se han convertido en el referente, para que el común fije el precio de venta de sus viviendas”, sostuvo.
En entrevista ofrecida al canal del Estado, el Ministro aseguró que el Gobierno no estimula ese esquema especulativo. “Todo lo contrario, lo hemos venido denunciado y combatiendo, ¿cómo?, construyendo más viviendas y enseñando a libro abierto cuánto cuesta producirlas”, expresó.
Ricardo Molina informó que desde el Ejecutivo se manejan topes de 360.000 bolívares para la construcción por unidad de vivienda, siempre que no requieran gran movimiento de tierra o pilotaje. “De manera que las personas pueden hacerse una idea de lo que cuesta un apartamento”, afirmó.
Aseguró que el Gobierno no caerá en el “juego de la burguesía amarilla y no legitimará los precios irreales”.