El atacante que mató a seis personas e hirió a otras siete al disparar la noche del viernes desde su vehículo en California era el perturbado hijo de un director de Hollywood, informaron el sábado la prensa y la policía.
La policía halló muerto al sospechoso poco después del ataque en la ajetreada ciudad de Isla Vista, cerca del campus de la Universidad de California en Santa Barbara. No estaba claro si el hombre se disparó a sí mismo o si la policía lo abatió.
Peter Rodger, un asistente de dirección del éxito de taquilla "Los juegos del hambre", que en 2012 lanzó a Jennifer Lawrence a la cima de la fama internacional, sospechaba que el atacante era su hijo de 22 años, Elliot. La versión, señalada a la prensa por Alan Shifman, el abogado del cineasta, demoró varias horas en ser confirmada por la policía.
El atacante, que conducía un vehículo BMW negro, disparó contra transeúntes en varios lugares de la pequeña ciudad costera, informó en la madrugada del sábado el jefe de Policía del condado de Santa Barbara, Bill Brown.
Luego intercambió dos veces disparos con la Policía desde su automóvil y logró escapar en ambas ocasiones. No obstante, chocó contra un vehículo aparcado y, cuando la Policía se acercó, "se comprobó que el sospechoso (...) estaba muerto, aparentemente por un disparo en la cabeza", dijo Brown. La Policía recuperó un arma corta del vehículo.
"El problema con este tipo de incidentes es que es obviamente la obra de un loco", dijo el jefe policial. "Hemos obtenido y estamos analizando evidencia escrita y visual que muestra que esta atrocidad fue un asesinato masivo premeditado".
Shifman, al abogado de la familia del director, dijo que Elliot Rodger sufría de "un altamente funcional síndrome de Asperger" y que estaba siendo tratado por varios profesionales. El abogado agregó que la familia estaba "derrumbada" y que dirigía sus "sinceras condolencias a todas las familias de las víctimas". AGENCIA