El presidente de la UEFA, Michel Platini, defendió este martes su "total transparencia" al ser el único miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA que ha reconocido haber votado a Qatar como sede para el Mundial 2022 y dijo que no le sorprende "la difusión de rumores sin fundamento dirigidos a ensuciar" su imagen.
Platini, en unas declaraciones remitidas por la UEFA a EFE, hizo una serie de aclaraciones "en respuesta a las insinuaciones aparecidas hoy en la prensa inglesa", que habla de una "reunión secreta" entre éste y el exdirectivo catarí de la FIFA Mohammed ben Hammam, denunciado por comprar el Mundial de 2022 para Q atar.
Platini indicó en las mismas que le "parece asombroso que una conversación con un colega del Comité Ejecutivo de la FIFA pueda transformarse en un complot de Estado" y reconoció que en 2010 vio al señor Mohammed ben Hammam en varias ocasiones porque ambos eran "miembros del mismo Comité Ejecutivo desde 2002".
"Durante esas conversaciones con Mohammed ben Hammam el tema era la candidatura a la presidencia de la FIFA. El señor Mohammed ben Hammam intentaba convencerme de que me presentara a la presidencia de la FIFA en las elecciones de 2011", aclaró el directivo francés.
Platini, que preside la UEFA desde 2007 e inició su segundo mandato en 2011 sin oposición, también recordó que "es el único miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA que ha reconocido cuál fue su voto en la reunión celebrada el 2 de diciembre de 2010 en Zúrich, donde se eligió a Rusia y a Catar como organizadores de los mundiales de 2018 y 2022, respectivamente".
"Quiero recordar que yo soy el único miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA que ha dicho públicamente por quién había votado (prueba de mi total transparencia) y que nadie dicta mi comportamiento. No me sorprende la difusión de rumores sin fundamento dirigidos a ensuciar mi imagen en un momento importante para el futuro del fútbol. Ya nada me sorprende", concluyó.
El diario británico "The Daily Telegraph" informó hoy de una reunión entre Platini y Mohammed Ben Hammam poco antes de almorzar en el Palacio del Elíseo con Nicolas Sarkozy, entonces presidente de Francia, el hijo del Emir de Catar y el primer ministro del país en noviembre de 2010, un mes antes de la votación para la adjudicación de la Copa del Mundo.
EFE