Neymar, sintiéndose todavía como un extraño en el sistema azulgrana, ya fue vital ante el Madrid en las dos victorias ligueras de la pasada temporada. Marcó en el Camp Nou y provocó un penalti y la roja de Ramos en el Bernabéu. Incluso en la derrota en la final de Copa estrelló un remate en el poste en el 90' que mandaba el partido a la prórroga. Aunque él debe centrarse antes en superar al Ajax para no que se complique la Champions League, el próximo sábado disputará el Clásico en su mejor momento en el Barça y también en su carrera. Para soñar.
El brasileño sale a gol por partido en la Liga (8) tras rematar de volea un pase de Alves, una acción que supuso el 2-0 ante el Eibar. Y en el 3-0 asistió a Messi, devolviendo uno de los regalos que le ha hecho el argentino en esta Liga.
Protegido por Luis Enrique
En el 77' fue ovacionado cuando Munir entró en su lugar. El Camp Nou no sólo valoró su gol, sino que lo intentara una y otra vez en los momentos más oscuros. Y Luis Enrique le cambió: tenía una amarilla y ya se había encarado con Lillo, que le provocó. No se puede ir al Bernabéu sin este Neymar
md