River del colombiano Teófilo Gutiérrez, Sao Paulo de Kaká y Rogerio Ceni y el sólido Atlético Nacional cafetero parten como favoritos en los cuartos de final de la Copa Sudamericana 2014.
El equipo argentino que dirige Marcelo Gallardo está de fiesta en el torneo local y en la Sudamericana, con un Teo Gutiérrez en estado de gracia y un once que hace del fútbol de toque una religión.
Los 'millonarios' recuperaron la memoria de su rica historia que siempre priorizó el fútbol vistoso y dejaron atrás el duro golpe, el peor de su historia, que significó haber descendido hace tres años a la segunda división.
Su rival en cuartos, Estudiantes de La Plata, dejó en el camino por un pelito en la tanda de penales al uruguayo Peñarol, otro histórico en lides internacionales, pero la versión 2014 de los 'pinchas' de La Plata no tiene el brillo ni el temple de una escuadra que asome como favorita.
Sao Paulo, otro de los equipos coperos de la región, puede consagrar la semana próxima a su arquero y símbolo Rogerio Ceni (41 años) en el jugador con más victorias con un mismo equipo de la historia, si el tricolor paulista no se impone el lunes en el Brasileirao.
Kaká, Pato y Ganso, grandes figuras internacionales años atrás, aún conservan su estirpe y pueden llevar lejos al Sao Paulo en la Sudamericana, aunque en cuartos se topará con un complicado Emelec de Ecuador, que dejó atrás al Goias brasileño en octavos.
Atlético Nacional, también acostumbrado a jugar instancias decisivas, tiene en los papeles el cruce más accesible, pero un día de inspiración de los poetas de César Vallejo puede frustrar cualquier favoritismo previo.
Y si no que lo diga el poderoso Boca Juniors de Argentina que pasó raspando a cuartos de final al eliminar en tanda de penales al sorprendente Deportivo Capiatá de Paraguay, un club de apenas seis años que le hizo sudar la gota gorda al conjunto xeneize.
Los boquenses jugarán contra el popular Cerro Porteño de Paraguay en el cruce más parejo de cuartos. El equipo guaraní eliminó al argentino Lanús, que resignó el cetro de campeón del torneo sudamericano en 2013.
Sólido en todas sus líneas, la formación guaraní se hace muy fuerte en su estadio de Asunción, mientras que La Bombonera de Boca ya no es el reducto inexpugnable que hacía temblar a muchos rivales: Capiatá lo demostró en la ida de octavos (1-0), en el resultado más sorpresivo de la Sudamericana-2014.
Boca deberá mejorar mucho, muchísimo, si pretende pasar a semifinales, donde podría toparse con su archirrival River, un condimento extra para la Sudamericana 2014, que toma temperatura con equipos históricos y otros noveles que sueñan con dar el gran golpe
AFP.
