El presidente ruso, Vladímir Putin, garantizó este jueves que Rusia no renunciará a la organización del Mundial de Fútbol de 2018, debido a la crisis económica en la que se encuentra sumido el país.
"Hay que organizar competiciones como el Campeonato del Mundo de fútbol, ya que la cantidad de niños que se dedicarán al fútbol, aumentará drásticamente", dijo Putin durante su conferencia de prensa anual.
Putin destacó que la correspondiente infraestructura deportiva, de transporte y sanitaria será construida en una decena de ciudades rusas, como fue en el caso de Sochi, que celebró en febrero los Juegos Olímpicos de Invierno.
"Este es un motivo más para el desarrollo de Rusia y en eso no da pena gastarse el dinero", subrayó.
El jefe del Kremlin, un gran aficionado al judo y al esquí de montaña, aseguró que su objetivo es introducir "la cultura del deporte" entre los rusos, para lo que se necesitan instalaciones deportivas, de lo contrario la gente hará cola para comprar vodka.
En relación con el legado de Sochi, las olimpiadas más caras de la historia, destacó que en el balneario del mar Negro todo está reservado hasta el fin de la temporada invernal.AFP