Una potente delegación empresarial de Nueva York, encabezada por su gobernador Andrew Cuomo, aterrizó este lunes enCuba para buscar opciones de negocio y adelantarse a posibles competidores ante las oportunidades económicas que se abren en la isla tras el deshielo diplomático iniciado con Estados Unidos.
“Han venido conmigo algunas de las compañías con más desarrollo del país, de las áreas en las que Cuba ha mencionado interés”, señaló Cuomo en la inauguración de un foro entre las compañías estadounidenses y cubanas, principalmente de los sectores de turismo, aviación, industria farmacéutica y alimentación.
Según el gobernador, la visita encaja en la nueva estrategia de su Estado de desarrollar “un enfoque mucho más agresivo para salir y buscar fuera oportunidades de negocio” y el viaje a Cuba es la primera misión comercial e institucional que realizan con ese fin.
También se trata de la primera delegación de un estado de EEUU que viaja a la isla desde el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre los dos países, aunque el gobernador de Virginia, Terry McAuliffe, tiene previsto visitar Cuba este año en una misión semejante.
Cuomo encabeza una delegación empresarial en la que figuran responsables de grandes compañías estadounidenses, como el consejero delegado de la aerolínea JetBlue, Robin Hayes; el vicepresidente de la compañía de tarjetas de créditoMasterCard, Walt M. Macnee; o la vicepresidenta de la farmacéutica Pfizer, Freda Lewis-Hall.
Además, están representadas en Cuba otras compañías como la tecnológica Infor, la farmacéutica Regeneron, el fabricante de yogures Chobani y responsables aeropuerto internacional de Plattsburgh.
En el foro con empresas cubanas, el gobernador abogó por el fin del embargo y alabó la “valentía” de los presidentes Raúl Castro y Barack Obama por haber impulsado el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países, rotas desde 1961, ya que “el aislamiento no ha funcionado”.
“El compromiso y las relaciones plenas son la mejor manera de construir un diálogo que permita discutir sobre todo tipo de temas”, subrayó.
En declaraciones a Efe a su llegada el aeropuerto de La Habana, el gobernador explicó que el propósito de la visita es que Nueva York esté presente en Cuba “desde el inicio de la aventura”, ya que “asistimos al comienzo de la transición en la relación entre los dos países, que va a tener beneficios económicos significativos para las dos partes”.
El primer punto de su intensa agenda fue un almuerzo de trabajo “muy productivo” con el ministro cubano de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, del que Cuomo salió con “muchas esperanzas sobre todo el trabajo que se puede hacer conjuntamente”.
En esa reunión, el ministro cubano explicó a la delegación de EE.UU. los pormenores de la Ley de Inversión Extranjera, aprobada en marzo del año pasado para atraer a inversores externos, ya que la isla necesita unos 2.500 millones de dólares anuales para hacer sostenibles las reformas económicas emprendidas por Raúl Castro para “actualizar” su modelo socialista.
Durante la visita relámpago de poco más de 24 horas, Cuomo se reunió con el cardenal Jaime Ortega, máximo representante de la Iglesia católica en la isla; y está previsto que mañana se vea con el número dos del Gobierno cubano, el primer vicepresidente Miguel Díaz-Canel.
En sus encuentros con autoridades cubanas, le acompañan personalidades políticas del Estado como el presidente de la Asamblea, Carl Heastie; o el líder de la mayoría demócrata en el Senado de Nueva York, Jeff Klein.EFE