Las FARC denunciaron hoy en La Habana una campaña para señalar a la guerrilla como responsable de la degradación medioambiental en Colombia, donde, según el grupo insurgente, son las políticas económicas del Gobierno las que perpetran un constante "ecocidio".
"La campaña organizada estos días señalando a las FARC como las principales responsables de la degradación medio ambiental en Colombia, carece de razón y franqueza", dijeron los negociadores de la guerrilla en una declaración leída por el insurgente Carlos Antonio Lozada, alias de Luis Antonio Losada.
A juicio del grupo armado, "no hay mayor degradación medioambiental que el 'ecocidio'perpetrado de forma constante por las políticas económicas de este gobierno al que las FARC combaten a diario, por las prácticas desreguladoras neoliberales que impiden el control y sanción a trasnacionales y grupos empresariales".
En los últimos días, Gobierno y guerrilla se han enzarzado en un cruce de acusaciones de tinte medioambiental después de que los negociadores de las FARC elogiaran esta semana la "valentía" de la encíclica del papa Francisco sobre los desafíos en el cuidado del medio ambiente.
Ayer, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, calificó de "cínicos" a los guerrilleros por realizar ese elogio mientras atentan en el país contra la infraestructura petrolera, con graves daños al medioambiente.
El pasado lunes, las FARC atentaron contra el Oleoducto Transandino, en el sur del país, que causó el derrame de 1,9 millones de litros de crudo y que es el que más daños ambientales y sociales ha causado en los últimos 10 años.
Unos daños "no deseados" y de los que la guerrilla no se enorgullece, según los delegados de paz de las FARC.
"No nos enorgullecemos del resultado de las acciones contra las infraestructuras petroleras como tampoco nos enorgullecemos de las muertes de soldados del ejército oficial cuando éstas se producen, a diferencia del regocijo que medios de comunicación y portavoces gubernamentales muestran cada vez que impúdicamente exhiben como trofeo la muerte de nuestros combatientes", añadieron en su declaración.
Según las FARC, "lo ocurrido en Tumaco ha tenido terribles y no deseadas consecuencias que obligan a que debamos pensar en esforzarnos por buscar soluciones urgentes a una confrontación cuyo escalamiento ha sido responsabilidad principal del Estado".
Gobierno y guerrilla prosiguen en La Habana sus negociaciones de paz inmersos en la discusión sobre el sensible tema de las víctimas, que debaten desde hace más de un año.
"La campaña organizada estos días señalando a las FARC como las principales responsables de la degradación medio ambiental en Colombia, carece de razón y franqueza", dijeron los negociadores de la guerrilla en una declaración leída por el insurgente Carlos Antonio Lozada, alias de Luis Antonio Losada.
A juicio del grupo armado, "no hay mayor degradación medioambiental que el 'ecocidio'perpetrado de forma constante por las políticas económicas de este gobierno al que las FARC combaten a diario, por las prácticas desreguladoras neoliberales que impiden el control y sanción a trasnacionales y grupos empresariales".
En los últimos días, Gobierno y guerrilla se han enzarzado en un cruce de acusaciones de tinte medioambiental después de que los negociadores de las FARC elogiaran esta semana la "valentía" de la encíclica del papa Francisco sobre los desafíos en el cuidado del medio ambiente.
Ayer, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, calificó de "cínicos" a los guerrilleros por realizar ese elogio mientras atentan en el país contra la infraestructura petrolera, con graves daños al medioambiente.
El pasado lunes, las FARC atentaron contra el Oleoducto Transandino, en el sur del país, que causó el derrame de 1,9 millones de litros de crudo y que es el que más daños ambientales y sociales ha causado en los últimos 10 años.
Unos daños "no deseados" y de los que la guerrilla no se enorgullece, según los delegados de paz de las FARC.
"No nos enorgullecemos del resultado de las acciones contra las infraestructuras petroleras como tampoco nos enorgullecemos de las muertes de soldados del ejército oficial cuando éstas se producen, a diferencia del regocijo que medios de comunicación y portavoces gubernamentales muestran cada vez que impúdicamente exhiben como trofeo la muerte de nuestros combatientes", añadieron en su declaración.
Según las FARC, "lo ocurrido en Tumaco ha tenido terribles y no deseadas consecuencias que obligan a que debamos pensar en esforzarnos por buscar soluciones urgentes a una confrontación cuyo escalamiento ha sido responsabilidad principal del Estado".
Gobierno y guerrilla prosiguen en La Habana sus negociaciones de paz inmersos en la discusión sobre el sensible tema de las víctimas, que debaten desde hace más de un año.
EFE