Durante la condecoración del Embajador Chino en Venezuela, Zhao Rongxian, el Presidente de la República, Nicolás Maduro, en presencia de diplomáticos internacionales, hizo referencia a otros asuntos de interés internacional, específicamente la situación relacionada al terrorismo en Siria.
El Presidente hizo un llamado de atención sobre la situación que atraviesa actualmente Siria: “Qué momentos dificiles le ha tocado vivir a Siria por la terquedad de los poderosos del mundo, de querer destruir al presidente Bashar al-Asad, destruir la cultura siria, el Estado Sirio”.
Se dirigió a la OTAN y recordó lo ocurrido en Libia: “Lo que hemos visto en Libia seria un niño de pecho al lado de lo que sería la destrucción de Siria, que no debe suceder.”
“De Venezuela clamamos por Siria, por la paz de Siria, por el respeto al presidente Bashar al-Asad, al estado de derecho. Por que la OTAN, occidente, Europa, rectifique a tiempo”, rectificó.
Alertó que la caída de Siria ante el terrorismo podría significar la caída inminente de Europa: “Europa no está viendo el peligro, no está viendo la amenaza de una especie de nuevo fascismo que ha surgido tomando elementos de la cultura musulmana”.
Reitero la lucha contra el terrorismo, y el apoyo al gobierno de Siria mientras que pidió por la detención del intervencionismo en los gobiernos del mundo: “Estamos a tiempo de detener en nuestra hermana Siria lo que sucedió en nuestra hermana Libia”.
“Ojalá Europa abriera los ojos a tiempo y se dieran cuenta del error, caro error que están cometiendo, y siendo arrastrados por otros. ¿Quién está pagando los errores de Libia? Europa, ¿o no?. ¿A dónde llegan miles de hermanos Africanos? a las costas del Mediterraneo. Lo mismo sucedería en las costas del Caribe si se derrocara la Revolución Bolivariana”, expresó comparando la situación de Europa con la de Latinoamérica en cuanto al intervencionismo.
Así mismo, manifestó que se ha abierto un canal diplomático importante con los Estados Unidos que pretende regularizar las relaciones con Barack Obama, y comentó sobre la reunión especial que se celebró el sábado pasado entre la Canciller Delcy Rodriguez, junto a la delegación presidida por Diosdado Cabello, en Haití.
Manifestó que el Gobierno de Venezuela cree en la diplomacia de paz: “Creemos en la diplomacia de paz, en la diplomacia del respeto, del no intervencionismo en los asuntos internos de ningún país. En la diplomacia que apunte hacia a un mundo donde nos reconozcamos todos. Creemos en la construcción de una nueva geopolítica mundial, de un mundo multicéntrico, múltiple en los centros de poder, pluripolar, donde se pueda compartir el poder del mundo, un mundo de equilibrio”
Lamentó no haber cumplido con la invitación a la cumbre anual que actualmente celebra la Unión Africana en Sudáfrica, a la CELAC, y a la reunión con el papa Francisco, motivada al reposo médico que lo comprometió.
